En 2024, Amazon volvió a alcanzar cifras récord, consolidando su posición como líder del comercio electrónico, a pesar de enfrentarse a críticas crecientes por parte de trabajadores, vendedores, gobiernos y consumidores.
En diciembre, miles de empleados de Amazon protagonizaron una huelga masiva, organizada por el sindicato Teamsters, convirtiéndose en la mayor protesta laboral contra la empresa hasta la fecha. La huelga, llevada a cabo a pocos días de Navidad, fue precedida por otra en noviembre, cuando trabajadores de 20 países pararon actividades durante el Black Friday. Conductores y empleados de almacenes, que representan la mayoría de los 1,5 millones de trabajadores de Amazon, lideraron estas movilizaciones en busca de mejores condiciones laborales.
Cambios en las políticas para vendedores
A finales de año, Amazon implementó cambios en sus políticas para vendedores, reduciendo los reembolsos por inventario perdido. Esta medida generó descontento, ya que afectó las ganancias de los vendedores, quienes ya enfrentan altos costos operativos dentro de la plataforma. Curiosamente, en noviembre, Amazon había declarado su intención de mantener la estabilidad en las tarifas para 2025, buscando simplificar las operaciones de los vendedores. Sin embargo, muchos describen a Amazon como todo menos «simple» o «estable».
Un tema que también marcó el año fue el lanzamiento del documental Buy Now en Netflix. Este filme, que aborda cómo las marcas y los minoristas fomentan el consumismo, destacó a Amazon como un ejemplo central. Durante la semana previa al Black Friday, el documental fue visto más de siete millones de veces, pero irónicamente, esto no redujo las ventas. Amazon reportó cifras récord durante el Black Friday, mostrando que las campañas críticas no lograron frenar el gasto de los consumidores.
Regulaciones y juicios en curso
En septiembre de 2023, la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC) demandó a Amazon por mantener prácticas monopólicas que, según la FTC, inflan precios, reducen la calidad y limitan la innovación. Este juicio, programado para 2026, es parte de una serie de investigaciones internacionales contra la empresa. A pesar de multas millonarias, como los $1.200 millones impuestos por un regulador italiano en 2021, Amazon sigue sin realizar cambios significativos en sus prácticas.
A pesar de las críticas, Amazon continúa creciendo en ingresos, membresías Prime y participación de mercado. Su modelo de negocio genera una dependencia difícil de romper: los trabajadores, tras las huelgas, regresan a sus puestos; los vendedores, a pesar de las altas tarifas, siguen utilizando la plataforma porque representa la mayor parte de sus ingresos. En 2024, la mayoría de los $750.000 millones en volumen bruto de mercancías de Amazon provinieron de vendedores externos, los mismos que enfrentan las tarifas crecientes.
La falta de alternativas reales refuerza el dominio de Amazon. Sin embargo, competidores como Walmart, Shopify, Temu y TikTok están comenzando a presentar una resistencia colectiva, descrita como la «Alianza Anti-Amazon». Cada dólar gastado en estas plataformas obliga a Amazon a competir y a reevaluar sus políticas.
Amazon sigue siendo un ejemplo de cómo un modelo de negocio exitoso puede superar desafíos y críticas. Su estrategia, basada en un efecto de «volante de inercia», donde más compradores atraen más vendedores y viceversa, ha acelerado su crecimiento durante más de 30 años. Aunque enfrenta resistencia, su impulso parece imparable, mostrando que, por ahora, el gigante del comercio electrónico no tiene intenciones de desacelerar.
