Durante este año 2024, diversas empresas y startups españolas de moda sostenible, como The Running Republic, Green Forest Wear, Circular o Run to Wear, han tenido que cerrar sus puertas, mientras el fast fashion y el ultra fashion continúan su crecimiento imparable.
Martina hace un llamado a los consumidores para que apoyen a estas pequeñas empresas como una forma de construir una industria de la moda más sostenible a través de decisiones de compra responsables.
Además, señala que uno de los grandes problemas es que las marcas sostenibles, al apostar por una industria ética, incurren en costos más elevados que las empresas de fast fashion, lo que les deja con márgenes reducidos, impidiéndoles crecer y reinvertir.
A nivel internacional, empresas como Renewcell, una de las más prometedoras en el sector, también cerraron sus puertas al no lograr alcanzar la masa crítica necesaria para su negocio.
Entrando además en el mes del Black Friday, pocas empresas sostenibles, por los referidos márgenes, pueden hacer frente a las rebajas tan agresivas que plantean otras empresas.
Moda ética para competir con China y EE. UU.
Este 2024 ha sido un año trágico en cuanto a cierres de empresas circulares en moda, pero es fundamental seguir apostando por la sostenibilidad, tanto desde el consumidor como desde otros actores clave, ya que representa la moda del futuro.
“Apostar por una moda ética y circular, fabricada con nuevas tecnologías cerca del punto de venta en Europa, es una oportunidad para reducir el déficit de competitividad que actualmente tenemos frente a China y EE. UU.,» afirma Raúl González, cofundador de Ecodicta y profesor invitado en másteres de moda en EAE, IED, Esdesign, Barreira, entre otros.
«Necesitamos que todos los agentes implicados se posicionen y apoyen, desde empresas y startups hasta ciudadanos y administración pública, porque no podemos permitir que sigan cerrando empresas sostenibles a la vanguardia del sector.»
“Medidas como el #IvaVerde, que reduzca el IVA al 10% para empresas éticas, o una Tasa Shein para financiar la inversión en circularidad, nuevos tejidos e IA aplicada a la moda, podrían transformar el sector, ayudándolo a transitar de uno de los más contaminantes del mundo hacia una senda de sostenibilidad y prosperidad,” concluye Raúl González.