GfK estima que el Retail Físico en España crecerá un 2,9% este año respecto a 2017. Un porcentaje mayor que el esperado para las principales economías europeas, como Alemania, Francia, Italia y Reino Unido. El pasado año el volumen de negocio del sector distribución en nuestro país se cerró con un incremento del 3% – una décima porcentual (0,1) por encima de nuestras previsiones.
En el estudio El Retail Europeo en 2018 se analizan diversos tipos de indicadores en los 28 países de la Unión Europea, para determinar la evolución y desarrollo del sector minorista en la región: poder adquisitivo, volumen de negocio generado en las tiendas, cuotas del consumo privado destinado al retail, tendencias en los precios al consumidor, así como la superficie y productividad del área de ventas. Este año como novedad, también se ha estudiado el volumen de negocio de la distribución en el sector moda.
La mejora de la economía en la mayoría de los países analizados ha dado lugar a múltiples revisiones al alza en relación con los gastos de los consumidores europeos. Por lo que se estima que el volumen de negocio del Retail Físico en los 28 países de la UE crecerá un 2,1% este año. Sin embargo, esta cifra se sitúa levemente por debajo del incremento estimado para la inflación, dando lugar a un modesto crecimiento en términos reales para el volumen de negocio del sector de la distribución minorista en Europa.
El crecimiento de España, entre los mejores de Europa Occidental
Respecto a los países, el top ranking para 2018 lo lideran una vez más los países del Este de Europa. Se esperan fuertes crecimientos en Rumanía (+7,5%), República Checa (+6,5%), Hungría (+6,0%) y Bulgaria (+5,3%).
Los países con economías más desarrolladas arrojan, en general, incrementos más moderados, como Luxemburgo (4,2%), Suecia (3,8%) o Austria (3%). De forma positiva, España se sitúa por delante de Alemania – donde se prevé un escueto 1% de crecimiento – o Francia, con un 2,4%. Por otro lado, la incertidumbre política en Italia de estos meses volvió a elevar la preocupación sobre la inestabilidad política y económica y se queda en un 0,9%, una cifra por dejado de la tasa de inflación prevista.
Para entender estas estimaciones, es necesario analizar el Poder Adquisitivo de la población. Desde una perspectiva económica, el pasado año fue relativamente tranquilo. A pesar de las negociaciones del Brexit, la economía europea experimentó un repunte.
En el caso de España, el poder adquisitivo per cápita fue de 14.080 euros, mientras que cada ciudadano de los 28 países de la Unión Europea (EU-28) dispuso de un poder adquisitivo medio de 16.436 euros. Esto equivale en Europa a un incremento nominal del 1,9% en comparación con el año anterior.
Solo Gran Bretaña (-1,5%) sufrió una disminución del poder adquisitivo, en parte debido a la devaluación de la libra británica. De nuevo, en el Este las perspectivas son halagüeñas: Rumanía (+7,8%) consiguió el mayor incremento en poder de compra. Sin embargo, el bajo poder adquisitivo per cápita del país (4.556 €) muestra la continua e inmensa brecha en los niveles de riqueza en toda Europa.
Cuanto más madura sea la economía, menor es la porción del gasto familiar destinado a compras básicas como alimentación y más baja es la proporción del consumo privado destinado al Retail. Observamos que esta regla se cumple en el panorama actual de los 28 países de la Unión Europea. Croacia (49%) y Hungría (49,5%), ambos con un poder adquisitivo por debajo de la media en Europa Occidental, muestran las tasas más altas, mientras que Alemania y Reino Unido se encuentran entre las posiciones más bajas de la tabla con 26,8% y 25,6%, respectivamente.
Por otro lado, en la UE-28 durante 2017 se ha registrado una disminución de esta cuota hasta el 30,5%. Algo lógico, ya que hay que tener en cuenta que el consumidor se está enfocando actualmente más en el ocio y en los servicios, en detrimento del Retail. A ello se une también la llegada de grandes competidores de comercio online. Ambos hechos explican la tendencia a la baja anual en Europa del gasto en el Retail Físico en relación con el total de los gastos de los consumidores.
El comercio online ha creado un mercado mucho más competitivo, lo que ha llevado a muchos minoristas con tiendas físicas en Europa a ampliar o mejorar sus espacios de distribución en los últimos años con el fin de mejorar la experiencia de compra de los consumidores.
La superficie de ventas per cápita es un indicador del nivel de saturación de un determinado mercado. Esta cifra generalmente aumenta a medida que el mercado madura y después se estanca una vez que el mercado alcanza el punto de saturación.
El análisis de GfK muestra que el área destinada al Retail Físico está adquiriendo una nueva utilidad para las empresas: mejora el conocimiento de la marca entre los clientes y aumenta el negocio online.