El comercio electrónico crece paulatinamente, y a pesar del descenso del consumo, los consumidores online no frenan sus compras. Así, el 63% de las tiendas online han aumentado sus ventas a lo largo de 2013, mientras que un 25% han mantenido un nivel similar al que tenían en 2012 y solo un 12% han disminuido sus ventas. Estos son algunos de los datos de la Encuesta Ecommerce España 2013 realizada por la agencia MarketingPro y presentado recientemente.
Desde la agencia preguntaron a 43 tiendas online que operan en España distintos aspectos sobre su negocio entre los que destacan las características fundamentales de sus negocios (facturación, evolución de ventas, cifra de exportaciones y antigüedad) comentadas anteriormente.
Los porcentajes de conversión (cuántos visitantes convierten en clientes), donde explican que los porcentajes de conversión son muy bajos para la mayoría de las tiendas (menos de la mitad superan el 2%). “Esto debería ser una gran preocupación para esas tiendas (invierten mucho en marketing pero luego no convencen al 98% o 99% de los visitantes). Hay un segmento significativo con porcentajes de conversión muy altos (un 10% de las tiendas declara tener más del 15% de conversión) aunque no descartamos que sea porque algunos no han entendido lo que se preguntaba o cómo se realiza el cálculo” explica el estudio.
En cuanto a facturación, la mayoría de tiendas online en España son PYMES con cifras de facturación relativamente pequeñas (menos de 200.000€ al año el 70% de las mismas). Menos de un 9% de las PYMES factura entre 200.000 y 1.000.000 de euros al año mientras que el 21% de las empresas facturó más de 1.000.000 de euros.
En lo que respecta a la internacionalización, el estudio indica como la mayoría de las tiendas online españolas no exportan nada (un 60%), menos de un 10% consiguen una parte importante de su facturación en el extranjero y un 19% factura en el extranjero entre el 1 y el 5% de su facturación total. Algo que según MarketingPro encaja con la realidad de que la mayoría son PYMES, que probablemente no tienen recursos suficientes para competir a nivel internacional.
