El ecommerce español Deporvillage, especializado en ropa y material deportivo, cumple su plan de negocio y cierra 2016 con unas ventas de 22 millones de euros, más del doble de las contabilizadas durante el ejercicio anterior. Un crecimiento por encima del 100% que tiene en el internacional la mitad de su peso.

“Ha sido un año muy especial para nosotros, porque hemos entrado en la ‘Champions League’ de los e-commerce de deporte europeos”, se felicitan los fundadores Xavier Pladellorens y Ángel Corcuera, al frente de un equipo de 100 profesionales que gestionan la comercialización online de un catálogo de 40.000 productos procedentes de 500 primeras marcas. Con sede en Barcelona y una inversión acumulada de 7M€, cuentan con una cartera de cerca de 300.000 clientes, repartidos en los cuatro países donde tienen presencia –España, Francia, Italia y Portugal–, con cifras de 1000 clientes al día, y más de un millón de visitas mensuales.

La compañía, que surgió hace seis años de una conversación informal entre amigos aficionados al deporte, es ya una de las startups españolas más consolidadas, y con mayor potencial fuera de nuestras fronteras. De hecho, sus ventas internacionales ya suponen el 50% de la facturación, y su objetivo es consolidarse como la plataforma líder en el Sureste de Europa.

“Nos sentimos ilusionados y muy orgullosos de haber podido cumplir el plan de negocio que teníamos previsto. En ello ha sido clave el equipo de profesionales que formamos Deporvillage –muy motivados para llevar la compañía hasta lo más alto–, así como la ayuda y el compromiso de nuestros inversores», aseguran los fundadores. Un ambicioso plan con meta en los tres dígitos, basado en el lanzamiento de campañas de TV, la selección del mejor catálogo, la mejora de la experiencia del cliente y la captación de los mejores talentos.