Los estragos económicos de la crisis del Covid-19 en España son considerables. Sin embargo,hay un sector que se está fortaleciendo: el e-commerce. Con el avance de la desescalada, la cifra de compradores online durante la última semana ascendió a un 67,1%, el dato más alto del confinamiento, según un estudio de nPeople para aea (Asociación Española de Anunciantes) y basado en los datos del tracking Consumer Pulse Report de GfK
Son tiempos difíciles para la economía global en general y la española en particular. La pandemia del Covid-19 ha desembocado en una situación sin precedentes: por primera vez en la Historia, se ha paralizado de forma consciente la actividad económica. No obstante, en pleno 2020, los hábitos de consumo están muy digitalizados, lo que se traduce en un auge del comercio electrónico, incrementado por el confinamiento y el cierre de tiendas físicas.
De hecho, en la semana del 11 de mayo se ha alcanzado la cifra de compradores online más alta de la pandemia: 67,1%. Otro dato que logra su máximo histórico es el número de usuarios que han comprado online alguna vez (91,2%), según el estudio de nPeople sobre la evolución del e-commerce durante el Covid-19 a partir del tracking semanal de GfK.
Estos datos manifiestan que el e-commerce español goza de buena salud, además de esbozar un perfil del consumidor medio, cada vez más digitalizado, abierto e innovador. Y es que un 52% de los encuestados ha apostado por nuevas tiendas en sus compras online, es decir, ha adquirido productos en e-commerce donde nunca antes había sido cliente.
Además, crece significativamente el número de compradores de perfil oportunista, es decir, los usuarios que están comprando online más durante la pandemia. Por primera vez se posiciona como el segmento más numeroso con un 36,6% de los usuarios, siendo el único que crece respecto a las anteriores oleadas.
En palabras de Rosario Borrego, Directora de Investigación en nPeople, “los modelos de consumo se están viendo profundamente afectados por una situación inusual y configurando un nuevo escenario que actores de la industria digital como los anunciantes han de tener muy en cuenta a la hora de planificar sus campañas y estrategias comerciales”.
El despertar de la moda con la desescalada
El confinamiento de los españoles en sus casas se ha traducido en un letargo para la moda en España. Los consumidores no compraban artículos de moda y se centraban en otro tipo de productos más enfocados con la supervivencia, como la alimentación y farmacia.
No obstante, el avance de la desescalada y la posibilidad de salir de casa en franjas horarias establecidas ha cambiado los hábitos de consumo. En la anterior oleada ya se atisbó un importante crecimiento de la compra online de productos de cosmética e higiene personal, pero en esta 4ª oleada el repunte se aprecia sobre todo en la moda: es la categoría que registra más compradores, por encima incluso de alimentación.
Las calles se llenan de gente y los grandes retailers de campañas publicitarias focalizadas en descuentos en ropa y complementos, factores clave para el impulso de la compra de moda. También disponemos de más tiempo y alternativas para disfrutar del ocio, por lo que la categoría de Entretenimiento se posiciona como la segunda con mayor demanda en esta oleada.
En definitiva, la desescalada está incentivando la compra online, que presenta un crecimiento progresivo durante la pandemia. Está haciendo que el e-commerce sea el futuro de cualquier establecimiento, planteando un reto urgente para aquellos que aún no disponen de plataforma online: llegar al cliente dependerá de la digitalización.