Tras varios días de cierto revuelo ante un comunicado de Fomento del pasado lunes en el que informaba que realizar transporte de viajeros sin licencia es sancionable siempre que exista una retribución económica, poniendo en jaque a servicios como BlaBlacar, finalmente ayer tuvo que aclarar puntualizando que el mero hecho de ponerse en contacto para compartir gastos de un desplazamiento (sin ánimo de lucro) es legal y no requiere de autorización oficial.
Fomento explicaba que “ante la aparición de anuncios en los medios y redes de comunicación mediante los que diversas empresas hacen pública su intención de poner en marcha plataformas de contratación de servicios de transporte de viajeros en vehículos de turismo particulares, el Ministerio recuerda que es necesaria dicha autorización y que los Servicios de Inspección del Transporte Terrestre velarán por el cumplimiento de la legislación vigente en la materia.”
Sin embargo, horas más tarde confirmaba que la clave para que un servicio de este tipo pueda ser sancionable es claro: “que exista una retribución económica en el desplazamiento.” Ante lo que BlaBlacar se siente tranquilo.La empresa por su parte, ayer emitió también un comunicado para aclarar la legalidad de su servicio:
¿Por qué BlaBlaCar es legal?
“BlaBlaCar es una plataforma para conectar personas particulares que permite compartir los gastos de un viaje en coche. No se trata de una retribución económica, sino de la compartición de los gastos asociados a ese trayecto en común. Por lo tanto ni BlaBlaCar ni los usuarios de BlaBlaCar, que solo comparten los gastos del viaje, se dedican al transporte de viajeros por cuenta ajena.”
Según comentan, “en BlaBlaCar no hay ánimo de lucro. Cuando se publica un viaje en la web, BlaBlaCar recomienda un precio por cada trayecto, calculado para que los conductores no obtengan ganancias, de acuerdo con la legislación.”
En 2011, BlaBlaCar firmó un acuerdo de colaboración con el Ministerio de Industria, Telecomunicación, y Comercio para fomentar las buenas practicas del “coche compartido” y ayudar así a la reducción de las emisiones de CO2 y la eficiencia energética.