Más de 7 millones de consumidores belgas compró online durante el pasado año, es decir, un 64% de la población del país centroeuropeo. Con respecto a 2013, la cifra de e-shoppers crece en 440.000 nuevos usuarios que por primera vez durante el año pasado compró algo vía internet, según un estudio de Comeos, la Federación belga de Comercio y Servicio.
Por su parte, uno de cada cinco consumidores online compró algún producto o servicio utilizando su smartphone o tablet, si bien sólo en 2,5% del total del ecommerce en Bélgica procede del canal mobile.
Gasto medio mensual: 153€
«La gente compra más a menudo online», subrayaba Dominique Michel, CEO de Comeos. «El 64% de los consumidores compró al menos una vez online en los últimos dos meses. Sin embargo, hastan menos que el año pasado. El gasto medio mensual ahora se sitúa en los 153 euros mensuales». «Aún es la ropa y el calzado las categorías más populares para las compras a través de internet, pero la alimentación se muestra como un sector en alza. De hecho aún sólo un 9% de los belgas compra alimentación online, pero cada vez lo hace más frecuentemente (el 40% lo hizo al menos 5 veces durante el último año) y un 44% espera hacerlo más a menudo en el futuro.»
El ecommerce impulsa las ventas físicas
Según el mismo estudio, el comercio electrónico impulsa las ventas en tienda física. «Al menos 1 de cada 4 consumidores practica el showrooming, es decir, primero echar un vistazo en la tienda para después comprar online. Pero, por otro lado, un 45% de los encuestados confiesa hacer ROPO, es decir, primero investigar online y después comprar el producto en tienda».
Los belgas le dan mayor valor al ahorro de tiempo como la razón más importante para comprar online. Sin embargo, el precio sigue siendo el principal driver de compra cuando se trata de comprar un producto a través de internet.
Retos para la industria ecommerce belga
Uno de los principales retos para la industria del comercio electrónico es conseguir una tasa de penetración de internet del 100% (actualmente es del 84,7%, la más baja de los países vecinos). Otro de los retos en «la necesidad de una plataforma de pagos segura, especialmente para la compra a través de dispositivos móviles».
Otra de las barreras se encuentra en la logística. Según Michel, «conforme crece el comercio minorista online, los problemas de suministro crecen año a año (+6% en 2014), lo que demuestra que necesitamos una mayor profesionalización del sector e-logistics. Los consumidores quieres que sus productos sean entregados 24/7″.