OpenAI, la empresa que puso en marcha Chat GPT y se encuentra bajo la dirección de Sam Altman, está creando una nueva red social fundamentada en algoritmos. Este proyecto podría posicionarla como rival directa de las plataformas de Elon Musk (X) y de Meta de Mark Zuckerberg (Facebook e Instagram). A pesar de que la iniciativa se encuentra en sus primeras fases, ya hay un prototipo interno enfocado en la creación de imágenes a través de IA, con un feed social incorporado.
De acuerdo con lo que reveló The Verge, todavía no se ha decidido si esta red social se convertirá en una aplicación independiente o en una nueva característica dentro del mismo Chat GPT. No obstante, lo que resulta claro es que OpenAI aspira a expandir su alcance en el ámbito digital más allá de los modelos de lenguaje, utilizando la interacción social para recopilar información en tiempo real para capacitar sus sistemas.
Esta iniciativa tiene como objetivos principales, por un lado, competir directamente con las plataformas sociales y, por otro lado, recolectar información en tiempo real producida por los usuarios para optimizar el entrenamientos de sus modelos de IA. La constante interacción de los usuarios en una red social proporciona una fuente valiosa de datos etiquetados que pueden emplearse para mejorar los algoritmos de IA.
Altman vs Musk
La creación de esta red social también surge en un escenario de creciente tensión entre Sam Altman y Elon Musk, una tensión que no es nueva. Musk fue parte del equipo fundador de OpenAI, pero abandonó la organización tras diferencias estratégicas.
En febrero de 2024, Musk propuso adquirir OpenAI por 91.556 millones de euros, algo que Altman rechazó, sugiriendo con ironía obtener X por 695,6 millones de euros. Esta competencia podría intensificarse si OpenAI introduce una red social que conecte directamente con X, considerando especialmente que Musk ha restringido el acceso de bots a su plataforma para proteger la información para su propia compañía de IA, xAI.
En marzo de 2024, Musk presentó una demanda contra OpenAI y su director ejecutivo, Sam Altman, argumentando que la empresa se desvió de su objetivo inicial de crear IA en beneficio de la humanidad. De acuerdo con la demanda, OpenAI se convirtió en una «filial de facto de código cerrado» de Microsoft, dando prioridad a las ganancias financieras sobre su objetivo inicial.
Desde entonces, Musk ha sido crítico con el progreso de la compañía, especialmente por su cambio hacia modelos de negocio y su vínculo con Microsoft. Además, su compañía xAI está desarrollando Grok, una IA integrada en X, lo que lo sitúa como un rival directo de OpenAI.
Una estrategia de expansión
La nueva red social de OpenAI, todavía sin nombre oficial, podría ser una respuesta a los crecientes retos legales éticos vinculados con el uso de datos para el entrenamiento de IA. Un informe de WIRED indicó que OpenAI habría empleado más de un millón de horas de videos de YouTube para entrenar GPT – 4, lo que genera interrogantes acerca de los derechos de autor.
En paralelo, la empresa ha iniciado el proceso de formar alianzas con entidades editoriales como Le Monde (Francia) y Prisa Media (España y América Latina), con el objetivo de emplear contenido de noticias para potenciar la calidad y actualización de sus modelos, tales como GPT – 4 y el nuevo GPT – 4.1.
A pesar de que no existe garantía de que este nuevo proyecto será revelado públicamente, su presencia señala una intención evidente de OpenAI por extenderse más allá de sus productos actuales y fortalecer su ecosistema digital frente a competidores de gran relevancia.