El final del año se caracteriza por un alto nivel de incertidumbre entre los minoristas independientes europeos de cara a las ventas de fin de año. Si las tiendas físicas quieren terminar este año con beneficios, tendrán que depender en gran medida de su capacidad para hacer frente a los desafíos económicos actuales, a la presión de las grandes cadenas y de los gigantes del comercio electrónico y, por supuesto, a cómo comprarán los consumidores durante esta última temporada del año.
Antes, la gestión de las existencias era fácil de predecir basándose en los resultados de años anteriores. Pero actualmente la sociedad vive en un mundo en el que cada vez hay más incertidumbre. Así lo confirma un estudio realizado por Ankorstore a 570 minoristas independientes de toda Europa, el cual demuestra que un tercio de estos son incapaces de decir si son optimistas o no respecto a las ventas de fin de año.
Asimismo, el 80% de los propietarios de pequeñas y medianas tiendas de toda Europa confirma que se ha visto afectado por la disminución del poder adquisitivo de los consumidores, el aumento de los precios de la energía y la presión de las grandes cadenas y los gigantes del comercio electrónico. Estos retos requieren mucho capital activo a costa de los beneficios y suelen dejar a los minoristas independientes con un exceso de stock, cuando ya deberían estar haciendo las compras para la nueva temporada.
No es de extrañar que el 47% de los minoristas se centre en la reducción de las existencias y en las compras de última hora, y esto es exactamente en lo que debería concentrarse cada uno de ellos. Limitar las existencias y reponerlas en cuanto se vea que un producto funciona bien en la tienda. Sin embargo, esto sólo es posible si los comercios son capaces de comprar cantidades mínimas, contar con márgenes
competitivos y disfrutar de una entrega rápida.
Mi experiencia y la de los cofundadores de Ankorstore ha sido similar a la de estos comercios y, por eso, creemos que hay otra forma de hacerlo. Por eso, ofrecemos un pedido mínimo de 100 euros durante todo el año, de modo que la reposición de existencias no sólo es más fácil, sino que también está exenta de riesgos, ya que sólo se piden los productos que se necesitan. Además, con la entrega rápida en 48 horas en toda Europa, incluso las compras de última hora son posibles.
Aunque los retos sean grandes, las tiendas físicas siguen teniendo mucho a su favor. Una de las principales ventajas de estas es que los consumidores pueden tocar y sentir los productos y recibir consejos de los propietarios de las tiendas antes de adquirirlos. Los minoristas independientes de toda Europa deberían aprovechar esta ventaja para luchar contra el descenso del gasto de los consumidores. Así lo confirma el estudio mencionado anteriormente, donde los retailers europeos aprovecharán principalmente los productos regionales (49%) y ecológicos (42%) para crear una atractiva oportunidad para captar cuotas de mercado de cara a las ventas de fin de año.
Además, los propietarios de tiendas independientes se han visto obligados a adaptarse a una velocidad sin precedentes durante los últimos años. Ahora, con el telón de fondo del aumento de las tasas de inflación, la crisis del coste de la vida y la continua agitación política, tienen que seguir adaptándose y buscar constantemente nuevas formas de mantener sus márgenes.
El Black Friday se ha convertido en un momento clave del calendario para las grandes cadenas y consumidores, sin embargo, sigue siendo un evento que divide a los minoristas independientes. El mismo estudio demuestra que la mayoría (60%) de los propietarios de tiendas de toda Europa no participarán en el Black Friday este año. La razón principal es que no quieren ofrecer «productos baratos» a sus clientes, sino que quieren mantenerse «fieles a los valores de su tienda» y ofrecer productos de calidad a precios razonables. Teniendo esto en cuenta, la pregunta sigue siendo: ¿cómo pueden los minoristas independientes mantener sus márgenes?
Es por esta razón que es importante que, en estos tiempos difíciles, los minoristas independientes reciban apoyo, como es el caso del «Black Friday Independiente», una iniciativa del marketplace creada para ayudar a los negocios locales a preservar sus márgenes, sea cual sea la forma en que decidan abordar las ventas de fin de año. Con esto, tanto si los propietarios de las tiendas celebran el Black Friday como si no, pueden ofrecer descuentos a sus clientes para fin de año, preservar sus márgenes manteniendo sus precios o reinvertir el dinero ahorrado durante la iniciativa.
El 73% de los comerciantes independientes teme que el actual contexto económico represente un riesgo para el futuro de su negocio. La forma en que los consumidores compren durante la temporada de fiestas de este año afectará a la trayectoria y la existencia de las tiendas locales. Por tanto, es muy importante que los consumidores compren de forma consciente y local, ya que los propietarios de estas tiendas son el alma de las ciudades. Es de gran relevancia unirse y apoyarles para recuperar el comercio minorista. Si no actuamos de forma rápida y decidida todos juntos, la consecuencia será irreversible: la muerte de nuestros barrios.