Cada día, cuando abrimos nuestro correo electrónico, es habitual encontrarnos con una cantidad variable de mensajes no deseados que llenan nuestra bandeja de entrada. Más allá de las molestias que puedan causar estos mails o el tiempo que se pueda perder diariamente al tener que eliminarlos, el spam puede acarrear otro tipo de problemas en los que poca gente se para a pensar.
Según los expertos de Kaspersky Lab, los ciberdelincuentes aprovechan este sistema como vía de transmisión de malware y suelen incluir archivos adjuntos o enlaces a webs maliciosos que pueden sentar las bases para un eventual ataque phishing o que introducen n código malicioso en el dispositivo del usuario. Todo ello supone que desde que estos mails entran en la bandeja de entrada del correo ya son un riesgo potencial y se convierten en una ventana abierta a troyanos bancarios.
Las técnicas usadas por los ciberdelincuentes están en constante evolución. Los analistas de Kaspersky han descubierto que, últimamente, estos mails se enmascaran tras documentos financieros como notificaciones de multas, alertas de pagos vencidos o confirmaciones de transferencias bancarias. También se esconden tras mensajes de organizaciones gubernamentales, compañías aéreas, reservas de viajes…
Kaspersky Lab estima que el porcentaje de spam en el tráfico de correo es de más del 50% del total. Teniendo esto en cuenta, y considerando el nivel de destreza de los estafadores, es fundamental que la tecnología sea capaz de combatir esta amenaza.
Desde Kaspersky Lab se han elaborado una serie de consejos para mantener limpia la bandeja de entrada:
- Contar con dos cuentas de correo diferentes: una pública, de uso más extendido, y otra secreta desde la que se escriba únicamente a personas conocidas.
- Usar diferentes credenciales y contraseñas. Estas no sólo ayudan a luchar contra el spam sino que evitan problemas si se sufre una brecha de seguridad o una infección en el correo.
- No mencionar nunca la cuenta de correo privada en Internet ni usarla para registrarse en ningún sitio web.
- No abrir jamás un archivo adjunto o hacer clic en un enlace de un correo sospechoso de ser spam o que provenga de un remitente desconocido. Tampoco se debe tratar de contestar a este tipo de mensajes.
- Usar soluciones de seguridad que contengan filtros anti-spam avanzados.