Todo lo viejo puede volver a ser nuevo. Al menos en China, un mercado donde la demanda de productos de segunda mano está aumentando en su canal online. La tendencia está siendo impulsada por un nuevo enfoque del consumidor: está preocupado por la sostenibilidad del planeta. Otro factor relevante es el auge de las aplicaciones de «recomendación«, que integran todas las funciones posibles relacionadas con la compra de bienes de segunda mano.
China tiene un mercado de segunda mano jóven pero de rápido crecimiento. Según el Centro de Investigación de Economía en Internet de China este mercado alcanzó los 500.000 millones de RMB (71.1000 millones de dólares) en 2017.
Existen factores únicos de China que impulsan en gran medida el potencial del mercado. La compra de artículos de segunda mano fue considerado tabú al relacionarlo como signo de lucha financiera y, por lo tanto, fue una fuente de vergüenza social. Sin embargo, actualmente la connotación de esta práctica es totalmente distinta: se considera compras inteligentes.
Otro factor relevante es la mejora de los niveles de vida en el país y es que los consumidores acumulan años consecutivos con subidas en su poder adquisitivo. Esto hace que el mercado de bienes de segunda mano también crezca.
Los millennials chinos son en particular el usuario clave de este mercado. Es una generación enfatizanda el consumo racional y la sostenibilidad en sus hábitos de compra. Según los datos de la encuesta del Instituto Sootoo, que investiga el sector de Internet en China, el 50% de los usuarios de la plataforma de recomendaciones en China tienen menos de 24 años, mientras que el 34% tiene entre 25 y 30. Además, los millennials suponen más del 60% del total de los 200 millones de usuarios en la plataforma de recomendación de Alibaba Group, Idle Fish.
