El marketplace lituano de ropa de segunda mano, Vinted, cerró a principios de octubre una operación de venta de acciones secundarias que elevó su valoración total a 5.000 millones de euros. Esta transacción se suma a los 340 millones de euros recaudados previamente en una ronda de financiación liderada por el grupo estadounidense TPG, lo que alimentó rumores sobre una posible salida a Bolsa.
Sin embargo, Thomas Plantenga, consejero delegado de Vinted, ha descartado que la salida a Bolsa esa sea la prioridad actual de la compañía. Según el ejecutivo, Vinted está enfocada en su expansión internacional y en la diversificación de su oferta. En este sentido, hace apenas cuatro días la compañía anunció su llegada a Irlanda, un nuevo mercado que se suma a las recientes aperturas de 2024 en Finlandia, Grecia y Croacia.
Vinted, que comenzó como una plataforma centrada exclusivamente en la venta de ropa, ha diversificado su catálogo en los últimos años con secciones de hogar, mascotas y, más recientemente, electrónica. Entre las categorías que planean introducir próximamente se incluyen juguetes, consolas de videojuegos, relojes de lujo y productos de telefonía móvil.
Además, la compañía está mejorando aspectos clave de su operativa, como los sistemas de pago, la verificación de productos y la logística. En este último ámbito, su filial Vinted Go está preparando la instalación de taquillas en Madrid y Barcelona, un movimiento que podría optimizar la experiencia de los usuarios.
El desempeño financiero de Vinted también respalda su posición como líder europeo en el sector. En 2023, la empresa registró un crecimiento de ingresos del 61% y logró un margen EBITDA de dos dígitos. Actualmente, más de un tercio (37%) de los miembros de la plataforma afirma que la ropa de segunda mano representa al menos la mitad de su armario, un dato que refleja el impacto de Vinted en el cambio de hábitos de consumo en Europa.