Una nueva propuesta de regulación presentada ante el gobierno de Australia podría obligar a Facebook y Google a revelar el funcionamiento de sus algoritmos mejor codiciados. Esta nueva regulación sería una de las consecuencias de una investigación de 18 meses que el gobierno ha llevado a cabo sobre el impacto de las grandes tecnológicas en la economía del país.
La propuesta, que de llegar a implementarse constituiría una de las regulaciones más duras a nivel global, llega de manos de la Comisión Australiana de la Competencia y del Consumidor (ACCC, por sus siglas en inglés) y será valorada por el gobierno australiano. En dicho informe la ACCC pide al gobierno la competencia necesaria para «solicitar información relevante por parte de las compañías» a través de una consulta pública.
Asimismo, el organismo sugiere la creación de un departamento propio dentro de la ACCC, con la función exclusiva de vigilar la actividad de dichas empresas. En el estudio se baraja que los algoritmos de Facebook y Google estén priorizando sus propios productos en sus plataformas, promoviendo así prácticas anticompetitivas, por lo que precisa tener información al respecto.
En la propuesta del organismo, que cuenta con un total de 619 páginas y se encuentra accesible en Internet, se precisa que las grandes tecnológicas tendrán que revelar el funcionamiento de sus algoritmos. Sin embargo, el procedimiento por el que revelarían dicha información no ha sido detallado en el documento.
Según cita la página 531 del documento: «La ACCC señala un posible comportamiento anticompetitivo, al aprovechar el propio funcionamiento del mercado en su beneficio, relevando así la necesidad de crear un departamento especializando dentro de la ACCC, dedicado en exclusiva a los mercados digitales, y a supervisar el funcionamiento de los algoritmos (recomendación 4)».