Simplicity Works, startup alicantina, se ha convertido en una de las empresas seleccionadas por la Comisión Europea para recibir una donación de 1,8 millones de euros del programa Accelerator.
La compañía, con sede en Elche, está destinada a la unión de piezas de determinados productos, como cuero, caucho, tela, madera, incluso metal, gracias a la tecnología de bonding 3D, un proceso de unión mediante la inyección química de polímeros. Este desarrollo permite reducir la mano de obra hasta cerca de un 70%. Otro aspecto positivo del bonding 3D es que se ahorra aproximadamente un 50% en el consumo de tela y cuero.
La innovación tecnológica que ha llevado a cabo esta compañía ha sido el motivo por el que ha sido seleccionada por la Comisión Europea, que pretende aplicar nuevas tecnologías al mercado.
«Estamos muy satisfechos de poder formar parte de un programa como Accelerator, no solo por la importante inyección financiera que aporta a nuestro proyecto, sino porque supone reconocer el valor estratégico y el enorme impacto que nuestra tecnología puede tener para la industria del calzado, impulsando la relocalización de la producción en Europa, y en particular, en España”, afirma Adrián Hernández, fundador y managing director de Simplicity Works, en un comunicado.
Crecimiento del proyecto Eco Challenge
Este proyecto fue creado de la mano de Simplicity Works con el objetivo de fabricar productos reduciendo las emisiones, y, vender, de esta manera, en Europa los zapatos que se fabrican en Asia. En este proyecto se han implicado varias empresas como Pikolinos, Jeanología, Greene Waste to Energy, entre otras.
La compañía tiene en mente lanzar para el año que viene su primera fábrica piloto que se situará en Elche Parque Comercial. La inversión prevista es de 2,5 millones de euros y tener una producción de 600.000 pares de zapatos.