Shein ha recibido la aprobación de la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés) de Reino Unido para su propuesta de oferta pública inicial (OPI) en la Bolsa de Londres, según confirmaron dos fuentes familiarizadas con el asunto a Reuters. Esta autorización representa un avance significativo en los esfuerzos de la empresa -fundada en China y con sede actual en Singapur- por debutar en los mercados públicos internacionales.
La aprobación de la FCA supone un importante paso adelante en la búsqueda de la cotización en Londres por parte de Shein, que presentó confidencialmente sus documentos ante el regulador británico el pasado mes de junio. Sin embargo, la compañía aún debe superar varios desafíos regulatorios y geopolíticos antes de materializar su salida a bolsa.
En este contexto, uno de los principales obstáculos pendientes es la aprobación por parte de la Comisión Reguladora de Valores de China (CSRC, por sus siglas en inglés). De acuerdo con el medio citado, Shein ya ha notificado a la CSRC sobre la autorización obtenida en el Reino Unido, pero aún no ha recibido la validación definitiva del regulador chino. Dicha aprobación es obligatoria para todas las empresas con operaciones sustanciales en China que buscan cotizar en el extranjero.
Aunque Shein trasladó su sede legal de Nanjing a Singapur en 2022, su estructura operativa continúa vinculada estrechamente a China. La compañía no posee plantas propias de fabricación, sino que externaliza su producción a una red de aproximadamente 5.800 contratistas, en su mayoría ubicados en territorio chino. Esto la somete, según las regulaciones chinas, a un escrutinio bajo el principio de «sustancia sobre forma«, que permite a la CSRC determinar el alcance de su supervisión basándose en la naturaleza efectiva de las operaciones.
Además del visto bueno de la CSRC, la OPI de Shein podría enfrentar interferencias adicionales por parte de otras autoridades chinas como la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, el regulador de la ciberseguridad y otros organismos encargados de supervisar las inversiones extranjeras y los riesgos de seguridad nacional.
El entorno geopolítico también complica el panorama. La compañía tendrá que lidiar con la reciente imposición por parte del presidente Donald Trump de aranceles sobre productos procedentes de China, así como con normativas más estrictas para los envíos directos sin aranceles desde el país asiático hacia Estados Unidos, uno de los principales mercados de Shein.
Por el momento, ni la FCA ni Shein han realizado comentarios al respecto.