Aunque el efectivo sigue siendo el modo de pago preferido para los consumidores en países como Portugal, en la actualidad, según GlobalData, la empresa de consultoría y análisis de datos, para 2020 podría quedar desbancado por los pagos electrónicos.
Así lo revela el informe elaborado por la compañía, ‘Panorama de pagos en Portugal: oportunidades y riesgos hasta 2022‘, revela que la proporción de efectivo en el volumen total de pagos disminuyó de 57.6% en 2014 a 52.0% en 2018 y se espera que caiga aún más a 48.4% para 2022.
El analista de pagos de GlobalData, Nikhil Reddy, comenta: «Se espera que la implementación de un sistema de pago instantáneo, el límite de las transacciones en efectivo y el impulso a la banca digital ayuden al país a avanzar hacia una economía digital«.
La introducción de SCT Inst, un plan de pago instantáneo paneuropeo, en Portugal en septiembre de 2018 fue un paso positivo en esta dirección. Permite transferencias electrónicas de fondos entre pares de hasta 15,000€ (US $ 17,183.22) en tiempo real en 10 segundos y está disponible 24/7.