Clearpay, la plataforma global de pago aplazado que está transformando la forma en la que consumimos, presenta las conclusiones de su análisis del mercado e-commerce, realizado de la mano de Kantar, para entender los nuevos hábitos de consumo de los españoles. Si 2020 supuso un salto en el comercio electrónico a raíz de la pandemia, el sector no ha parado de crecer desde entonces, convirtiéndose en un canal clave, especialmente para la compra de moda y de productos de belleza. Actualmente, el gasto medio online anual realizado por los españoles es de 213€ y 66€, respectivamente.
Con una situación económica que afecta al consumo y a las expectativas de futuro, los consumidores buscan más contención y control de sus presupuestos; un 68% prefiere controlar sus gastos, ahorrar y prevenir, mientras un 65% se lo piensa más que antes a la hora de hacer un gasto extra. La gestión del presupuesto y la forma de pagar han cambiado y es que solo el 2,6% de los consumidores españoles paga con transferencia bancaria compras de moda y belleza online y solo el 1,7% lo hace a plazos con intereses. Al final, esto muestra que para las compras habituales con gastos bajo-medios, se busca una experiencia de compra simplificada y se huye de las financiaciones con intereses. “Clearpay ofrece una opción de pago planificada y sencilla, adaptada a las necesidades de cada cliente en tres cuotas sin coste”, comenta Beatriz Velarde, Country Manager de Clearpay en España. “El consumo responsable combina decisiones de compra sostenibles y basadas en una planificación de compra estable, y ese es el tipo de consumo hacia el que apuntan las nuevas generaciones y que nosotros queremos promover”, añade Velarde. La planificación financiera se vuelve así clave, con un 25% de españoles que afirma tener un presupuesto cerrado a la hora de comprar ropa.
El perfil de consumidor también ha cambiado, ahora tiene nuevas sensibilidades y busca alternativas ante las restricciones presupuestarias. La conciencia por el cuidado, no solo propio, sino hacia lo que nos rodea aumenta, y el consumidor español adopta actitudes y comportamientos orientados a un consumo cada vez más sostenible. Un 54% intenta tomar medidas para mejorar su bienestar emocional y mental, y a un 63% le gusta cuidarse por dentro y por fuera. Del mismo modo, el 52% cree que comprar ropa de segunda mano es una forma de cuidar el medio ambiente y el 26% a menudo compra productos de belleza con envase rellenable. Además, los compradores con más relevancia en el negocio online, en los sectores de moda y belleza, tienen entre 35 y 54 años. De hecho, los consumidores con más de 55 años ganan relevancia frente a los más jóvenes. Entre todos ellos, el BNPL, el método de pagos aplazados sin costes, sigue ganando terreno y se sitúa ya como el tercer método de pago escogido, solo por detrás del pago con tarjeta y de otros sistemas de pago sin aplazamiento.
El shopping journey de los consumidores españoles también ha cambiado. Crece el interés por estar informado de las últimas tendencias a través de Internet y aumenta la consulta de las páginas webs de sus tiendas favoritas, se haga o no la compra en la web.
Los hábitos de consumo a menudo dependen de factores ajenos al consumidor, como la situación económica, pero también de factores sociales y culturales, como la penetración del e-commerce o de las soluciones de pago. El perfil de consumidor más preocupado por el control del gasto y la sostenibilidad de sus compras es el resultado de un entorno macroeconómico incierto, pero también de un cambio en el estilo de vida, más marcado por la planificación financiera y el consumo responsable.