El 53% de los españoles están interesados en participar en iniciativas de consumo colaborativo frente al 44% que se registra de media en Europa, un dato que sitúa a España como el 5º país de la UE con mayor potencial de crecimiento de la economía colaborativa, por detrás de Eslovenia (71%), Grecia (61%), Portugal (60%) e Italia (55%), según datos de Nielsen. Estos datos se han destacado en la jornada sobre Sharing Economy que ha organizado el Global Corporation Center de EY e IE Business School hoy en Madrid.
Kiron Ravindran, investigador del Global Corporation Center y Decano Asociado de IE Business School, y Pablo González, socio de Transformación Digital de EY, han analizado los beneficios y riesgos de la economía colaborativa, y sus aplicaciones por áreas y sectores. También han participado en la jornada Ian Paterson, co-fundador de Respiro; David Sucar, Director de Desarrollo de Negocio de Traity; Juan Ignacio, CEO de Cabify Spain; RamónBlanco, CEO de Etece; y Alejandro Artacho, co-fundador de Spotahome, para compartir sus experiencias analizar los retos y el potencial de crecimiento la economía colaborativa.
Kiron Ravindran ha recordado que “Uber, la mayor compañía de taxis del mundo, no es propietaria de ningún vehículo. Facebook, la mayor red social, no crea contenido. Alibaba, el distribuidor chino, no tiene stock. Y Airbnb, la compañía líder de alquiler de alojamientos particulares, no tiene propiedades”. Pese a ello, ha apuntado Ravindran, Uber tiene una valoración de 20 billones de dólares y AirBnb de 41 billones de dólares, que superan la de muchas de las principales compañías tradicionales en sus sectores de actividad. Entre las principales motivaciones de los consumidores que participan en la economía colaborativa figuran “la reducción de costes, la sostenibilidad de los nuevos modelos de negocio, la utilización de la tecnología, el cambio de valores y una nueva mentalidad que impulsa a actuar en comunidad y alejarse del consumo excesivo, el deseo de no ser propietarios o ayudar a quienes lo necesitan”, ha señalado Ravindran.
Para Pablo González, socio de Transformación Digital de EY, “están surgiendo nuevos modelos de negocio, nuevas formas de generar ingresos y nuevos agentes. La economía colaborativa es una gran oportunidad para nuevas empresas y emprendedores pero también puede serlo para grandes empresas ya establecidas. Si no te anticipas y no eres proactivo en la adaptación de tu modelo de negocio, tendrás un gran riesgo de pérdida de valor”. Para González, este fenómeno se ha acelerado con la crisis económica “pero realmente implica un cambio de actitud en el consumidor, soportado por la tecnología, lo que hace que la transparencia, la rapidez y el compartir a todos los niveles sea prioritario”. González ha subrayado que “muchas empresas llegaron tarde al e-commerce y ahora tienen una nueva oportunidad con la economía colaborativa, un fenómeno que es imparable”.
La economía colaborativa crecerá un 25% en 2015, alcanzando una facturación de 3,5 billones de dólares, según datos de Forbes. Y en cuanto al tipo de productos o servicios más atractivos para los consumidores colaborativos figuran la formación (29%), las herramientas (23%), la electrónica (19%), las bicicletas (18%) o los coches (17%), según datos de Nielsen. Estos datos configuran un nuevo escenario empresarial, en el que el modelo colaborativo será clave del consumo en los próximos años, han señalado los expertos.