De acuerdo con un nuevo informe del Ministerio de Comercio de China, los mercados del ecommerce generaron 13 billones de yuanes (2 billones de dólares) en las operaciones del 2014. Se trata un crecimiento de 25 por ciento comparado con el año 2013, según el portavoz del gobierno chino, Shen Danyang. Estas cifras incluyen las transacciones B2B online y las ventas de los minoristas en línea, así como las ventas de plataformas de comercio electrónico como JD y Tmall.
China tiene la mayor población online del mundo – 632 millones el año pasado – cuyas compras se han disparado en en los últimos años, ya que para los chinos comprar a través de internet resulta más barato y son capaces de adquirir productos del extranjero.
Durante el Singles Day del 11 de noviembre, el gigante del e-commerce Alibaba señaló que los consumidores gastaron el récord de 9,3 mil millones de dólares, un 60 por ciento más que en 2013.
Las autoridades chinas esperan que el comercio electrónico se conviertan en un nuevo motor para el crecimiento de la segunda mayor economía del mundo, cuyo crecimiento se desaceleró el año pasado a un 7,4 por ciento, el más bajo en casi un cuarto de siglo: «El e-commerce es una industria emergente y debemos apoyar su desarrollo saludable», dijo el Primer Ministro Li Keqiang, el pasado año. Con tal premisa, es posible que China domine el panorama mundial del comercio electrónico.