La nueva ley de apuestas lleva más de un mes en acción. Con todos los operadores empezando a arrancar otra vez con nuevas páginas, tras los traspasos desde las .com a las .es, llega el momento de valorar los primeros datos.
Para los usuarios, la tónica general que se percibe en redes sociales y foros es que la nueva ley es muy perjudicial para ellos, con nuevas obligaciones tributarias y un acceso a mercados con cuotas cada vez peores y menos interesantes. Algo que llega provocado por la obligación de las operadores de tributar en España, en lugar de en el extranjero como hacían la mayoría de casas de apuestas.
Los operadores lo ven de forma más sosegada, a tenor de los intereses manejados. Una de las casas más importantes del mundo de las apuestas es Betfair, valora de forma positiva la nueva regulación, tal y como indica a este medio el responsable de comunicación y marketing de la firma, Xabier Ojer Nieto: “Desde Betfair, creemos que la nueva ley supone un cambio positivo, necesario y por lo que estábamos luchando desde hacía muchos años”.
Un cambio sin embargo, que conlleva mayor regulación, mayores impuestos, con lo que las casas de apuestas van a tener que ofrecer unas cuotas peores, lo que representará un descenso de usuarios, y con ello el cierre de algunos operadores, como opina el propio Xabier: “Muchas casas de apuestas van a tener unos márgenes que no van a ser rentables para los clientes y esto provocará que muchos de ellos quizá se tengan que buscar casas de apuestas fuera de España. A mi modo de ver, no hay sitio para todos los operadores, aunque habrá que esperar al menos un año para ver como se desarrolla todo”.
En estas primeras semanas está siendo clave el traspaso de los usuarios antiguos (de la web .com) a la nueva página web (.es), así como la incorporación de nuevos clientes, algo que Nieto cree que se hará con naturalidad: “Naturalmente no todos los antiguos se traspasarán a la nueva web, pero también van a llegar usuarios nuevos, con lo que perdemos por un lado lo ganaremos por otro”.
En cuanto a cifras de estas últimas semanas, cabe destacar lo ocurrido en la Eurocopa de fútbol, evento que los apostantes pudieron aprovechar al máximo y que movió en total más de 1.000 millones de euros en apuestas. Un ejemplo fue la final del torneo, entre España e Italia, que llegó a cruzar más de 18 millones de euros. En este partido, quien apostase porque España ganase 4-0, se llevó un buen pellizco, ya que se llegó a pagar a 240 euros por euro apostado. Otra satisfacción más a añadir al gran triunfo de “la roja”.