Amazon anunció ayer por la noche los resultados económicos de su tercer trimestre mostrando un importante crecimiento pero decepcionando a los analistas. Amazon presentó unas ventas netas de 32.700 millones de dólares en los 9 primeros meses del año, un 29% más que el mismo periodo del año anterior cuando consiguió 25.400 MM$.
Una cifra de negocio que generó un beneficio neto de 252 millones de dólares en el tercer trimestre, un resultado notablemente superior a los 79 millones del mismo periodo de 2015. Un beneficio menor del que esperan los analistas, que ven cómo Amazon factura una cifra muy elevada en comparación con los beneficios que no acaban de despuntar más.
En lo que va de año, el gigante norteamericano lleva facturado 92.245 millones de dólares, a la espera de un último, con el periodo de compras navideña, que siempre es el más importante para la compañía. Para el periodo que va de octubre a diciembre, Amazon estima que puede conseguir un crecimiento en sus ventas de alrededor de un 17 y un 27%, lo que equivale a 42.000 y 45.500 MM$.
Tras conocerse los resultados, las acciones de Amazon cayeron hasta un 7% a la hora de cierre de esta noticia.