Platanomelón estrena su primera pop up store en Madrid. Se trata de un espacio ubicado en el número 46 de la Gran Vía madrileña y que se podrá visitar hasta el próximo 30 de noviembre en horario de 10 a 22 horas. Es la primera vez que la marca líder en venta de juguetes eróticos abre una tienda física y lo hace con la intención de “llevar la educación sexual a Madrid”, según aseguran desde la compañía. En el espacio, de 70 metros cuadrados, se podrán encontrar productos de las categorías más solicitadas de su catálogo.
En línea también con su propósito de marca, este mes, Platanomelón ha instalado una gran lona en la calle Fuencarral de Madrid con el mensaje “Aprender de sexo con el porno es como querer ganar el mundial con la Play” para reivindicar la urgencia de la educación en materia sexoafectiva para dotar a los jóvenes y a la sociedad de información que pueda proporcionar la toma de acciones sanas en su esfera sexual, emocional y relacional, y así asegurar una sexualidad saludable, inclusiva y feliz. El objetivo de Platanomelón es generar debate y que se ponga en la agenda política la necesidad de regular el derecho humano universal a recibir educación sexual.
Desde su nacimiento, Platanomelón ha tratado de democratizar la felicidad y bienestar de las personas, ayudándoles a mejorar la relación que tienen con su sexualidad, sin tabúes ni prejuicios. Por eso consideran la educación como algo fundamental en el desarrollo personal y social y han querido llamar la atención con esta acción reivindicativa alineada con su propósito de marca.
En la actualidad, en nuestro país, la educación sexual integral no está regulada y depende de la decisión que quiera tomar cada comunidad autónoma. Además, aquellas comunidades que llevan a cabo acciones relacionadas con la educación sexual, lo hacen desde un enfoque meramente prevencionista y médico, abarcando temáticas relativas a la anticoncepción y el riesgo de infecciones de transmisión sexual (ITS). Eso excluye de la ecuación información acerca del consentimiento, las relaciones sanas, diversidades sexuales y de género, el autodescubrimiento y el placer, entre otras.
“El hecho de que consultar dudas sexuales y ver sexo en internet sea la principal fuente de aprendizaje de los jóvenes tiene consecuencias como la creación de expectativas respecto al sexo que no se ajusten al sexo real, creencias sexistas referentes al género, frustraciones y distorsiones, entre un sinfín de experiencias más”, asegura Monica Branni, psicóloga y sexóloga de Platanomelón.
Según la última Encuesta Nacional sobre Salud Sexual y Anticoncepción entre los Jóvenes Españoles, casi el 50% de los jóvenes aprende de sexo por internet. Además, en muchos casos, acceden a contenido pornográfico antes incluso de sus primeras experiencias sexuales compartidas, de hecho un 90% asegura haber visto porno antes de los 12 años. Por eso, no es raro que la pornografía se convierta en el primer acercamiento al erotismo que tienen los jóvenes y sea su referente.
