Stikets, dedicada a la venta online de etiquetas personalizadas, vinilos y otros productos infantiles, entrará en los próximos meses en los mercados de Bélgica y Portugal con web propia. La empresa apuesta así por continuar la expansión por el sur de Europa iniciada el año pasado, cuando abrió portales en Francia e Italia que ya representan el 15 % de la facturación de la compañía.

Aunque Stikets nació enfocada al mercado español, actualmente sus páginas web reciben pedidos de 15 países de Europa y Latinoamérica, así como de Estados Unidos. “Nuestros productos son universales porque dan respuesta a una necesidad de todas las madres: marcar ropa y objetos con etiquetas que resisten los lavados y que son 100% personalizables”, explica Stephanie Marko, fundadora y CEO de Stikets.

Más de 100.000 clientes en 5 años

Stikets suma ya más de 100.000 clientas y tiene previsto cerrar este 2015 procesando el doble de pedidos que el pasado año. Marko señala que, además de su apuesta por la internacionalización, la diversificación de productos también ha contribuido al crecimiento de la empresa. El portal ha sumado a sus famosas etiquetas, nuevos productos como vinilos infantiles, vinilos de pizarra y pulseras identificativas, que han tenido una buena acogida en el canal online.

Su CEO avanza que, en los próximos meses, Stikets seguirá ampliando su catálogo en el ámbito de la personalización, “siempre con el objetivo de mejorar la calidad de vida de sus clientes; todos nuestros productos están pensados para ganar tiempo, ahorrar dinero y dar soluciones a las familias”.

Así, además de apostar por un producto de calidad y un proceso de compra fácil, otro de los grandes retos de Stikets ha sido desde siempre ofrecer una atención al cliente inmejorable, rápida y totalmente personalizada:“Aunque requiere mucha dedicación, nuestro objetivo es asegurar la satisfacción de todos nuestros clientes”, afirma Marko.

Adaptarse al cliente y a sus necesidades

Stikets ha ampliado su cartera de productos para ofrecer soluciones específicas a las distintas necesidades de los clientes. En este sentido, por ejemplo, crea diseños exclusivos de etiquetas y adapta sus productos para dar respuesta a peticiones concretas, como es el caso de las etiquetas que alertan de alergias.

La empresa introduce estas novedades en todos los mercados donde está presente. Para Stikets, la internacionalización es un activo muy positivo, ya que permite mejoras continuas del producto que se pueden replicar fácilmente en otros países, de modo que todos sus clientes salen beneficiados.