En abril de 2016 finalizó una de las negociaciones más grandes de una startup de internet, en la que Privalia paso a ser parte de vente-privee. Según las cifras presentadas por la compañía en el registro mercantil, durante el primer ejercicio bajo el paraguas de la marca francesa, los resultados de Privalia se han vuelto a teñir de rojo.
El año lo cerró con un incremento del 14% de los ingresos, hasta los 460 millones de euros, pero la española ha tenido que desembolsar casi 24 millones de euros al cancelar los tres planes de retribución a empleados y directivos en forma de acciones.
Según ha publicado el diario El Español, en total, las perdidas ascienden a 13,5 millones de euros. De no ser por este pago extraordinario, la empresa fundada por José Manuel Villanueva y Lucas Carné habría obtenido unos 10 millones de euros de beneficios, por debajo de los 11,3 millones logrados en 2015.
La empresa tenía tres planes de retribución con acciones. A la primera, que iba dirigido a determinados empleados, se le dio luz verde en noviembre de 2008. Cuatro años más tarde se aprobó un nuevo plan en sustitución de este al que se sumaron la mayor parte de los empleados, y el último se aprobó en 2013 e iba dirigido a los mismos destinatarios.
La compra de Privalia por parte de vente-privee se hizo oficial en abril de 2016 tras meses de rumores. Según las fuentes del sector a las que tuvo acceso Ecommerce News, el montante de la operación rondaría los 500 millones de euros, cantidad que Privalia siempre ha puesto encima de la mesa cuando ha llamado a las puertas de vente-privee.com, Showroomprive, Zalando o el fondo 3Si.
