Mistral, una empresa francesa de inteligencia artificial, ha recaudado 600 millones de euros (aproximadamente 640 millones de dólares) de inversores. Esta ronda convierte a la compañía en uno de los principales players de Inteligencia Artificial en Europa y uno de los principales competidores de OpenAI tras alcanzar una valoración de 5.800 millones de euros, según aseguraron algunas fuentes al Financial Times.

Entre los inversores en la última ronda se encuentran las empresas de capital riesgo General Catalyst, Andreessen Horowitz y Lightspeed Venture Partners. Destacando sobre todo grandes empresas como Nvidia, Samsung, Salesforce, Cisco, IBM y BNP Paribas. No obstante, se notó la ausencia en esta ronda de Microsoft, que en otras ocasiones se había mostrado interesado en la compañía, pero desde su participación en OpenAI parece haberse apartado.

Con esta nueva ronda de financiación, habrían alcanzado un total de 1.000 millones de euros recaudados, sumando los 385 millones de euros obtenidos en diciembre de 2023. A pesar de esto, los fundadores Timothée Lacroix, Guillaume Lample y Arthur Mensch, ex empleados de Meta y Google, continúan siendo los accionistas mayoritarios.

La startup francesa tiene poco más de un año y está construyendo modelos de lenguaje grandes, similares a los que desarrolla OpenAI para su chatbot. En el caso de Mistral, a finales del 2023 lanzó su propio chat llamado Le Chat, que está disponible en una amplia gama de idiomas. También han lanzado otros productos como sus modelos de lenguaje Mistral 7B o su versión actualizada Mistral 8X7B, que se diferencian de otros modelos en que este es de código abierto y cualquier persona puede descargarlos, copiarlos, modificarlos y reutilizarlos. Por ahora, el modelo que lanzaron está en versión beta.

Una llamada a Europa

La transición hacia un panorama de IA más geográficamente diversos trae consigo implicaciones significativas para empresas a nivel mundial. A medida que las compañías exploran las oportunidades ofrecidas por las tecnologías de Mistral AI, el panorama global de la IA se transformará, con Europa emergiendo como un epicentro de innovación y colaboración. Este cambio no solo promoverá una distribución más equitativa del conocimiento y los recursos tecnológicos, sino que también fomentará un entorno competitivo más dinámico y diverso, impulsando avances más rápidos y soluciones más inclusivas en el campo de la inteligencia artificial.