El gigante mundial del retail, la cadena estadounidense Walmart, anunciaba la semana pasada sus resultados económicos para el ejercicio fiscal 2014-2015 (concluido el 31 de enero) con unas ventas que alcanzaron los 485.700 millones de dólares, un 1,9% más que durante el año anterior, gracias a un desempeño particularmente bueno durante el último tercio.
«But, we’re not satisfied», anunciaba el Presidente y CEO de la multinacional, Doug McMillon. Por ello, la empresa ha anunciado una serie de inversiones significativas en recursos humanos y la división de e-commerce para el nuevo año fiscal. Precisamente, el canal online de la compañía crecía un 22% durante el Q4 (y un 30% para las 13 semanas de las vacaciones navideñas), un porcentaje muy considerable, pero inferior al 30% registrado en el mismo periodo del año anterior. En total, Wal-Mart pretende invertir cerca de 1.000 millones de dólares.
«Sabemos que los clientes buscan una mejor experiencia de compra, y estamos invirtiendo estratégicamente para mejorar sus expectativas. Nuestra prioridad es construir grandes tiendas y continuar integrando nuestros establecimientos físicos con nuestra tienda online y nuestro negocio de mobile commerce», anunciaba McMillon.
