Las casas son cada vez más pequeñas y la marca de decoración y muebles, Ikea, quiere adaptarse a esta reducción de metros habitables en los hogares. La compañía se ha asociado con la compañía vasca, Ori Systems, para diseñar muebles que se adapten automáticamente al espacio.
Hasier Larrea, CEO de la compañía declarado que “el concepto de los muebles robóticos sale al mercado para que un micropiso pueda tener una habitación, una habitación con salón, una oficina o un vestidor”.
Ori Systems ha desarrollado Rogan, un mueble robótico que permite desplazar los armarios para crear un vestidor o convertirse en una cama. Este muebles ha sido fruto de largas investigaciones para adaptar la industria inmobiliaria a la situación actual.
Pero la compañía va más allá y es que, se encuentra trabajando en modelos que se incluyan activación mediante comandos de voz y que puedan controlarse a través de dispositivos móviles.
Aunque la sede de Ori Systems se encuentra en San Sebastián, el grueso del negocio se desarrolla en Boston (EE.UU). Gracias a su actividad en dicho mercado, la empresa factura ya 37.000 millones al año. Tal y como comenta el empresario “en el mercado estadounidense suministramos a promotores inmobiliarios con productos que son algo más sofisticados, pero esta colaboración con Ikea nos permite tener acceso a una infraestructura que alcanza todo el mundo”.
