Google surgió hace 23 años y fue entre los años 2019 y 2020 cuando quiso promocionar su mercado de Google Shopping. Al principio no tuvo resultados buenos, sin embargo, a finales del 2020, consiguió tener cerca de 8.000 vendedores.
El problema era que los compradores descubrían a los vendedores de Google Shopping a través de comprar publicidad en dicha página. Por esta razón, la compañía modificó y mejoró su estrategia de compras para centrarse en el eCommerce. Se alió con grandes empresas como Shopify, BigCommerce, GoDaddy… entre otras, lo que hizo que subiera de nivel.
Una vez conseguido llegar a un número elevado de compradores, el siguiente paso fue incorporar un método de pago a Buy On Google. La empresa imitó a Shopify y decidió implantar su mismo Shop Day y motor de pago, es decir, esta herramienta hace que Google no controle los pagos por sí mismo. Además, los compradores pueden realizar una compra más rápida y sin ningún tipo de problema.
¿Qué es lo que Google quiere realmente?
Google no quiere ser el competidor de ningún marketplace como es el caso de Amazon, solamente busca atraerlos para tener atención comercial. Pretende que las grandes empresas de retail compren en él, ya que, de esta manera, aumentan los sitios de compra los cuales están reflejados como anuncios. Google intentó convertirse en un eCommerce pero no hubo suerte, por lo que decidió quedarse en el mismo sitio, en el negocio de la publicidad. Es por esta razón, por la que el gigante de Internet ha recibido numerosas críticas, recientemente recibió una acusación formal por acaparar la publicidad online mediante un acuerdo que firmó con Facebook.
Otras iniciativas
Además de impulsar Google Shopping, también lanzó Froogle, su primera iniciativa llevada a cabo hace dieciocho años. Sin embargo, no dio sus frutos ya que, al no haber podido convertirse en minorista no pudo tener ningún tipo de participación en el eCommerce. Aunque, hay que mencionar, que se convirtió en la mayor red publicitaria para el comercio electrónico.