Con sede en Reino Unido, Flatfair nació en 2016 para revolucionar el segmento de los alquileres de piso. ¿La problemática a resolver? Las grandes cantidades iniciales que un inquilino debe desembolsar para entrar a vivir en un nuevo piso de alquiler, que – de media en Madrid – supone desembolsar entre 2.000 – 3.000€ de inicio (mes corriente + 1 ó 2 meses de fianza + 1 mes de agencia, en el caso de que sea así).
Problemática que para el inquilino supone disponer de una importante cantidad económica para mudarse, y para los arrendatarios largos periodos de vacío entre alquileres.
Flatfair ha anunciado una nueva ronda de financiación de 9 millones de libras (casi 10 millones de euros, liderada por Index Ventures) para seguir creciendo en su modelo de negocio. La plataforma Flatfair propone servir de intermediario entre arrendatario y arrendador, ejerciendo de depósito para garantizar al arrendador la fianza, pero a un precio mucho más reducido.
Con la tecnología de pago de Flatfair, que ya utilizan las principales compañías de bienes raíces, como Greystar, Places for People y CBRE, los inquilinos pueden asegurar su arrendamiento solo con su tarjeta de débito. A cambio, los inquilinos pagan una tarifa única de membresía de Flatfair equivalente al alquiler de una semana durante toda la vida de su arrendamiento. Al mismo tiempo, flatfair ofrece 12 semanas de protección para los propietarios y la recuperación gratuita de cualquier cargo adicional por finalización de la tenencia, eliminando el estrés de los propietarios y agentes de tener que gestionar esta recuperación completa ellos mismos.
La compañía planea utilizar el capital para contratar a un número significativo de ingenieros de productos, científicos de datos y especialistas en desarrollo de negocios que crearán y desarrollarán nuevas características y servicios.