El desarrollo de soluciones digitales en el sector financiero sigue ganando impulso en Europa. En los últimos meses, el Banco de España ha comenzado a explorar el uso de tokens digitales y tecnologías de registro distribuido (DLT) en distintas iniciativas, centradas principalmente en la emisión y liquidación de activos y monedas digitales de banco central (CBDC).
El objetivo es analizar hasta qué punto estas tecnologías pueden contribuir a que el mercado financiero sea más eficiente, seguro y transparente. Estos avances responden a las demandas de una sociedad que valora, cada vez más, la agilidad y la fiabilidad en sus transacciones económicas.
El interés por la innovación financiera en España avanza de la mano del crecimiento del mercado de criptoactivos. Muchos usuarios, incluso antes de que estas iniciativas institucionales comenzaran a ganar visibilidad, ya mostraban curiosidad por conocer las criptomonedas con más potencial, relacionando su uso con diversos beneficios.
Entre ellos, la posibilidad de reducir costes, acelerar procesos de liquidación o acceder a nuevas oportunidades de inversión. Aunque aún en fase de desarrollo, el ecosistema ibérico de criptoactivos comienza a dar señales de madurez, con la presencia de startups y empresas tecnológicas que colaboran activamente con entidades bancarias y organismos reguladores.
Esta interacción está sentando las bases para el diseño de proyectos piloto y la implementación de sandboxes regulatorios.
El Banco de España y su colaboración con el sector privado
El Banco de España, como entidad responsable de la supervisión del sistema financiero nacional, ha adoptado una postura proactiva frente a la transformación digital. En mayo de 2024, la institución puso en marcha un proyecto experimental destinado a probar la aplicabilidad de tokens digitales en el mercado financiero mayorista (wholesale).
En términos prácticos, se trata de investigar cómo la representación digital de activos y monedas, apoyada en tecnologías como blockchain, puede simplificar procesos internos, mejorar la trazabilidad de las operaciones y aumentar la eficiencia en las transacciones entre grandes entidades financieras.
La participación de Minsait (empresa perteneciente al grupo Indra) ha sido clave, aportando experiencia tecnológica y apoyo en la implementación de nuevas soluciones. Esta colaboración entre el sector público y el privado, basada en pruebas de concepto y el desarrollo de plataformas DLT, ha sido bien recibida por el mercado español.
Refuerza, además, la tendencia hacia una mayor apertura y la voluntad del país de adaptarse a las exigencias de una economía cada vez más digitalizada. Según datos oficiales del Banco de España, la implicación de empresas especializadas en innovación tecnológica está contribuyendo de forma decisiva a alinear la regulación financiera con el proceso de transformación digital.
CBDC mayoristas y su potencial en el mercado español
Las monedas digitales de banco central (CBDC) han sido objeto de debate en varios países europeos, especialmente en relación con los proyectos impulsados por el Banco Central Europeo (BCE) y, en menor medida, por los bancos centrales nacionales. En el caso del Banco de España, las pruebas actuales se centran en las CBDC de tipo mayorista (wholesale).
Es decir, aquellas destinadas a transacciones entre grandes instituciones financieras y bancos comerciales, en lugar de operaciones cotidianas realizadas por consumidores finales. Este modelo ofrece muchas ventajas, como la liquidación casi inmediata de pagos y transferencias, lo que contribuye a reducir el riesgo de contraparte.
También se observa una reducción de costes al eliminar intermediarios y procesos manuales, lo que disminuye los gastos operativos a gran escala. Además, las operaciones registradas en redes distribuidas ofrecen mayor control y transparencia, al ser fácilmente trazables y menos susceptibles a fraudes o errores contables.
Otra ventaja relevante es la flexibilidad para incorporar nuevas funcionalidades. La emisión de títulos tokenizados, así como el pago de cupones o amortizaciones, puede integrarse dentro del mismo ecosistema, agilizando aún más los procesos.
Para el mercado financiero español, que en 2024 movilizó más de 900.000 millones de euros en operaciones relacionadas con títulos y activos de renta fija, según estimaciones del Instituto Nacional de Estadística (INE), este tipo de innovación podría transformar de forma profunda la infraestructura actual.
La implementación de plataformas DLT en los procesos de emisión y liquidación no solo permitiría reducir costes y tiempos operativos, sino que también abriría la puerta a servicios más avanzados basados en smart contracts (contratos inteligentes). La aplicación de tokens digitales en el entorno financiero consiste en representar valores o activos mediante registros criptográficos en una blockchain.
Esto incluye no solo monedas digitales, sino también bonos, acciones y otros instrumentos financieros. En entornos de prueba como el desarrollado por el Banco de España, se busca simular condiciones reales de mercado para analizar aspectos clave como la velocidad, la seguridad y la viabilidad económica de cada operación.
Durante el primer semestre de 2024, el mercado cripto en España superó los 60.000 millones de euros en volumen negociado. El sector financiero nacional también está adoptando tendencias vinculadas a la tokenización y al uso de nuevas tecnologías para mejorar sus servicios. De ahí la importancia de realizar pruebas de concepto que permitan evaluar los beneficios reales de estas innovaciones.