El Grupo Alibaba abrió la semana pasada un almacén destinado a productos extranjeros. La nave está situada en una de las zonas de China autorizadas por el gobierno para que las compañías extranjeras puedan almacenar productos sin tener que mandarlos por la aduana (exentas de impuestos, a modo de Zona Franca).
Cuando un comprador online realiza un pedido, el retailer manda el producto por un sistema de aduanas más rápido y realiza la entrega normalmente antes de 48 horas.
El almacén tiene 1.981.200 metros cuadrados donde se exponen más de 1.000 productos con éxito en ventas. Estos productos extranjeros se venden en la página de Alibaba Tmall Global, creada en 2014.
El almacén cuenta con diferentes pabellones según el lugar de origen, con una sección destinada a productos de Estados Unidos, Japón, Corea, Europa, Australia y Nueva Zelanda. Entre los productos expuestos, se encuentran productos de nutrición de la marca GNC de Estados Unidos o cosméticos LG de Corea del Sur.
Los clientes pueden probar muestras de los diferentes productos y si finalmente deciden comprar, pueden escanear el código QR con sus smartphones, que les redirigirá a la página Tmall Global donde podrán realizar el pedido.