Cada segundo se envían más de 3000 paquetes en todo el mundo y, si los pronósticos son ciertos, podemos esperar que el volumen global de paquetes se duplique para 2026. Mientras tanto, los consumidores son más exigentes que nunca. Quieren decidir por sí mismos dónde, cuándo y cómo se entrega un paquete y, al mismo tiempo, esperan que esto se haga de una manera rápida y sostenible.

En esta situación, son las marcas de las que se espera cumplir con las expectativas de los clientes tanto de pedidos como de un mundo más sostenible. Porque como cumplir con estas expectativas aumenta los ingresos, no cumplirlas pone en riesgo a empresas enteras. La pregunta es: ¿van de la mano la sostenibilidad y las expectativas de los consumidores?

4 tendencias clave de las entregas

La respuesta corta es sí. El enorme flujo de paquetes ha dado lugar a un enorme impulso de innovación dentro del sector logístico. Estas cuatro tendencias contribuyen a que la entrega sea más sostenible, al mismo tiempo que ponen al cliente en primer lugar.

1. Incentivar las opciones de entrega respetuosas con el medio ambiente

La mejor manera de abordar un problema implica hacer que los consumidores sean conscientes del impacto que tiene la opción de entrega que eligen. Hacer un pedido online puede ser tan fácil como darle clic a un botón y encontrar tu pedido en la puerta de tu casa al día siguiente. Es muy difícil que la gente piense en cómo su opción de entrega puede impactar en el medio ambiente. La entrega rápida es buena, pero no siempre es necesaria. Muchos consumidores optarán por ahorrar dinero y recibir su pedido un poco más tarde. Según un informe de Accenture, el 36% de los compradores online prefieren esperar más tiempo para recibir la entrega gratuita. Así que una de las formas de animar a los clientes a optar por una entrega más sostenible es cobrando por la entrega al día siguiente y ofreciendo una entrega ‘slow’ a de forma gratuita. O simplemente dejarlos elegir entre una entrega express o normal, para que sean conscientes del impacto medioambiental que tiene el envío rápido. Así que es importante dejar claro las opciones de entrega en el momento de check out para que los clientes puedan optar tanto las  opciones de entrega flexibles como ecológicas.

2. ‘Uberficación’ de la última milla

Otra forma de hacer entregas al cliente de forma rápida y sostenible es hacer un uso inteligente del espacio de carga existente. ¿Sabías que más del 50% de los camiones en Europa circulan parcial o totalmente vacíos? Al utilizar el espacio de carga vacío de los camiones, podemos hacer que la logística sea más sostenible y también reducir los costes de transporte. Esta ‘Uberficación’ de la logística de la última milla es una tendencia imparable que incluso está llegando a las personas. Recientemente, Amazon lanzó Amazon Flex, también conocido como Uber para la entrega de paquetes, donde las personas y las pequeñas empresas pueden registrarse para formar parte de su red de entrega. Aunque la ‘Uberficación’ de la logística es una tendencia relativamente nueva, es una forma interesante de optimizar el uso de activos y, cuando se organiza de manera eficiente, ciertamente puede contribuir a la reducción de CO2.

3. Pasos hacia un futuro más verde

Es simple: cuanto menos kilometraje consumen los conductores en la carretera, menor es su huella ambiental. La tecnología actual permite la optimización de rutas automatizada, lo que aumenta la eficiencia del vehículo. Por ejemplo, Greenplan, una start-up financiada por DHL, ha desarrollado un algoritmo que fomenta la planificación de rutas ecológicas teniendo en cuenta datos como las emisiones de carbono según el tipo de vehículo y los límites de autonomía de los vehículos eléctricos. Al combinar estos datos, Greenplan crea rutas eficientes y sostenibles. Sin embargo, esto no es todo. Un algoritmo no solo puede ayudar a reducir las emisiones, sino que también puede contribuir a la satisfacción del cliente, como demuestra Budbee. La empresa de mensajería sueca utiliza un algoritmo para crear rutas eficientes, pero también permite a los consumidores cambiar su entrega a una franja horaria concreta. De esta forma, el algoritmo satisface tanto al consumidor como al medio ambiente.

4. Localizar la entrega: un esfuerzo extra para conseguir un mundo más verde

Finalmente, la entrega local ofrece una solución tanto para una entrega sostenible como flexible. Al utilizar redes de entrega locales, un paquete debe viajar una distancia más corta, lo que reduce las emisiones y consigue una entrega más rápida al cliente por lo que se trata de un win-win claro. Amazon, por ejemplo, duplicó su estrategia de entrega local en marzo 2020, invirtiendo en una red de nuevos micro centros de distribución que almacenan artículos populares. De esta forma, Amazon puede ofrecer a sus clientes rapidez y comodidad al tiempo que reduce las emisiones. Sin embargo, la estrategia de entrega local no solo está hecha para los gigantes del comercio electrónico. Las tiendas online más pequeñas también pueden acercarse a las casas. Si una tienda online tiene muchos paquetes en la región, puede hacer que los entregue un mensajero local, tal vez incluso en bicicleta o a pie. Esto no solo ahorra CO2, sino que esta corta distancia a menudo facilita que la entrega se haga más rápidamente que a través de una red nacional.

Sin duda, el mercado de entregas es un mercado en constante cambio. En esta carrera por una entrega rápida y flexible, las empresas deben adoptar soluciones de entrega sostenibles y asequibles que hagan que la última milla sea más ecológica. Innovación es crucial para satisfacer las demandas de los consumidores y, al mismo tiempo, ofrecer opciones sostenibles, y la buena noticia es que ya se han dado los primeros pasos. Así que ahora es el momento de seguir haciendo pasos para asegurar un futuro más  verde y sostenible.