El pasado viernes quisimos ser testigos directos del pistoletazo de salida al Black Friday, que inauguran una nueva temporada de compras navideñas especialmente inciertas este 2022. Inflación, situación en Ucrania, desabastecimiento, encarecimiento de créditos e hipotecas… un escenario macroeconómico nada optimista con el que afrontar el inicio de la campaña.
Y sin embargo, desde CTT Express esperan tener durante esta campaña entre un 40-50% de incremento de actividad en comparación con días normales. Solo en esta plataforma logística de Coslada, CTT Express espera alcanzar picos de 200.000 envíos al día, nos contaba Leticia Martín, Dircom de la compañía.
Y aunque Coslada es la más grande en España, CTT Express tiene repartidas un total de 53 plataformas en nuestro país, 12 en Portugal. En total 65 centros de distribución a nivel ibérico, a los que habría que sumar los 17 puntos de cruce existentes en la península.
Desde el punto de vista de personal, CTT Express se ha reforzado para esta campaña con un incremento de plantilla del 20%: 250 personas más en almacenes y cerca de 500 conductores más para la entrega de última milla.
Durante las 8 semanas que puede durar la campaña de Navidad (desde Black Friday hasta Reyes Magos e incluso Rebajas de Enero), una compañía de transporte urgente como CTT Express puede sumar el 25% del total de su facturación anual, según nos cuenta Luis Rodríguez, Director Financiero de CTT.
“Trabajamos con ETTS también en la planta. Con los conductores trabajamos con proveedores especializados en reparto con los que solemos trabajar habitualmente y les solicitamos ese refuerzo. Todo, además, a través de una plataforma de un portal del proveedor en donde está todo gestionado y ellos tienen acceso a la información de forma fácil y rápida igual que nosotros. Es una constante comunicación”, comenta Leticia Martín.
El directivo apunta a que la campaña de 2022 se comportará de forma similar a 2021, si bien en términos generales crecerá ligeramente. Actualmente CTT representa en nuestro país el 5% de la cuota de mercado, mientras que en Portugal el gigante CTT copa más del 50% del volumen de envíos online anuales.
CTT cuenta entre sus clientes con marcas como Zara o PcComponentes, o marketplaces como Amazon, AliExpress y distribuidores como Worten. Son las empresa que más venden, y consecuentemente los paquete que más vamos a ver en los sorter o cintas clasificadoras de sus almacenes.
Pero también hay cabida para los medianos y más pequeños. “Tenemos una base de clientes medianos muy amplia, que venden fundamentalmente en el canal online, especializadas en productos verticales y que experimentan importantes crecimientos”.
Eso sí, actividad y rentabilidad no siempre van de la mano, y como señala Luis Rodríguez, “hay que tener muchísimo cuidado porque cuando una compañía como la nuestra de transporte incrementa de forma repentina el volumen, los costes no se incrementan en la misma proporción, se incrementan muchísimo más y hay que ser muy cuidadoso con la productividad y la gestión del coste para que esos envíos nuevos sean rentables”.
Dentro de esa rentabilidad también hay que tener en cuenta las devoluciones o la logística inversa, una línea de negocio adicional para empresas de transporte. Las devoluciones en Ecommerce han experimentado un auge importante en los dos últimos años, hasta el punto de facilitar esta logística para devolución de productos es uno de los nuevos drivers de compra en lo que se fijan los clientes. Según CTT, durante los dos últimos años, a raíz de la pandemia, se ha incrementado mucho el número de devoluciones, que para CTT suele situarse en el 5% del total de envíos realizados.
Los números de la patronal y las reivindicaciones del sector del transporte
Durante nuestra visita a la plataforma de CTT de Coslada pudimos también hablar con Francisco Aranda, Presidente de UNO Logística, Organización Empresarial de Transporte y Logística. Desde la patronal apostaba por un ligero retroceso en el volumen de envíos durante esta campaña de Navidad, en concreto estimaban se moverían unos 100 millones de paquetes en 2022 VS 106 millones de envíos en 2021, una caída del 5,3%.
Aunque este año se vivirá de forma más tranquila tras desconvocare la huelga de transporte, el sector sigue teniendo sus reclamaciones, según nos traslada Aranda.
La primera de ellas una reducción de los impuestos directos para que los recursos se puedan destinar a la inversión tecnológica que necesita el sector en estos años de crecimiento exponencial.
En segundo lugar, mayor flexibilidad al mercado laboral para dar respuesta a una demanda estacional cada vez más compleja de gestionar.
En tercer lugar, ayudas en forma de recursos públicos para afrontar la transformación ecológica que se solicita al sector del transporte.
“El sector del transporte de última milla supone el 0,4% de los vehículos en Madrid, por lo que nos parece injusto que el foco se centre en nosotros en materia medioambiental. Haciendo un simil con el transporte público, cuantos más autobuses existan en servicio, más vehículos particulares quitamos de las calles. Con el comercio electrónico sucede lo mismo, en cada furgoneta pueden ir 100, 200 o 300 paquetes y esos son 100, 200 o 300 personas que no están deambulando por las ciudades de compras; algo que consideramos que también habría que tener en cuenta”, concluye Aranda.