El día de la ciberseguridad anima a pensar en los retos que se les presentan a las empresas y entidades financieras a causa de la Inteligencia Artificial. Con su ayuda están emergiendo nuevas formas de fraude, y la vigilancia tiene que adaptarse a las amenazas. Mangopay, la plataforma modular de pago, está muy atenta a los cambios en el cibercrimen, y ayuda a las empresas a gestionar pagos cada vez más seguros y protegerse del fraude en los pagos.

Según el informe de IBM Coste de Filtración de Datos en 2023, el coste medio de estas filtraciones en la industria financiera fue de 4,1 millones de euros, un 15% más que en 2020. El coste para las organizaciones financieras es un 28% más alto que la media general, perdiendo aproximadamente 5,4 millones de euros por filtración.

La IA intensifica el riesgo de robos de datos

El fraude en los pagos se inicia habitualmente con el robo de datos de un usuario mediante técnicas como phishing, el vishing, y el smishing, técnicas en las que el criminal se pone en contacto con una persona, haciéndose pasar por una organización legítima. El número de tarjeta de crédito o datos que permitan acceder y tomar el control de una cuenta de la cuenta del usuario son los más preciados.

Ahora, gracias a la IA, los chatbots, deep fakes y los clonados de voces se pueden usar para engañar y obtener estos datos o, por ejemplo, persuadir a trabajadores del servicio al cliente para que transfieran dinero a las cuentas de los criminales haciéndose pasar por clientes. La inteligencia artificial también se está utilizando para desarrollar nuevos tipos de malware que pueden robar información de pago de los consumidores, con el llamado «screen scraping», que puede registrar todo lo que un usuario teclea en la pantalla de su ordenador.

La IA puede ser también el mayor aliado en la ciberseguridad

Este avance de la IA va a obligar a las empresas a empezar una carrera tecnológica, innovando más rápido para ser más astutas que los defraudadores y mitigar así sus pérdidas. La IA puede luchar contra una serie de intentos de fraude, como la detección de la apropiación de cuentas, el uso de cuentas falsas, el fraude con tarjetas, el screen scraping y los ataques de bots. Se puede utilizar en tiempo real para identificar y señalar actividades sospechosas e integrarse con otros sistemas de seguridad, como la verificación de identidad y la autenticación biométrica, para ofrecer un enfoque más completo de la prevención del fraude.

La Inteligencia Artificial puede también ayudar a aprovechar grandes cantidades de datos que producen al día las transacciones online, aprendiendo sobre los cambios en el comportamiento de los clientes. Los algoritmos de aprendizaje automático están diseñados para reconocer patrones basados en una gran cantidad de datos, que pueden aprovecharse para identificar actividades fraudulentas. Los defraudadores imitan en ocasiones el comportamiento genuino del usuario o explotan patrones para violar la seguridad. Por esta razón, la IA puede lograr el equilibrio entre la protección contra el fraude y la experiencia del cliente.

«En Mangopay trabajamos constantemente aprovechando las últimas tecnologías para reforzar la prevención del fraude en los pagos digitales en nombre de nuestros clientes, incluido el robo de datos personales«, explica Nicolas Fournié, Country Manager en España de Mangopay. «La Inteligencia Artificial presenta retos que evolucionan y nuevos riesgos para los pagos, pero su poder también puede aprovecharse en beneficio de la prevención del fraude. Nuestro objetivo en este campo es aprovechar las opciones que ofrece la IA para reforzar la seguridad de nuestros clientes y sus usuarios finales«, añade.