En un movimiento estratégico clave para el futuro del sistema financiero europeo, la alianza EuroPA (European Payments Alliance), integrada por soluciones nacionales de referencia como Bancomat (Italia), Bizum (España), MB WAY (Portugal, a través de SIBS) y Vipps MobilePay (Noruega y Dinamarca), ha anunciado el inicio de una cooperación con EPI Company (European Payments Initiative). El objetivo común: acelerar el desarrollo de una infraestructura paneuropea de pagos que refuerce la soberanía digital del continente y permita realizar transacciones sin fricciones en toda Europa.
Esta colaboración representa un paso significativo para hacer frente a uno de los grandes desafíos de la economía digital europea: la dependencia de soluciones extranjeras en un ámbito tan estratégico como el de los pagos. Frente a este escenario, EuroPA y EPI apuestan por construir una respuesta conjunta basada en soluciones ya existentes, con una fuerte adopción local y probada eficacia, interconectándolas para ofrecer una experiencia fluida tanto a consumidores como a comercios.
Ventajas de esta nueva alianza
La iniciativa contempla una solución interoperable que cubra todos los casos de uso relevantes: pagos entre particulares (P2P), pagos en comercios físicos y pagos online, respetando las especificidades de cada mercado. Para ello, se ha iniciado una fase de análisis técnico y de viabilidad, cuyos primeros resultados se esperan para finales del verano de 2025. Esta fase exploratoria evaluará cómo integrar las capacidades de cada participante de forma eficiente, manteniendo sus respectivas marcas y experiencias de usuario.
El alcance inicial de esta alianza cubrirá 15 países europeos, que en conjunto agrupan a más de 382 millones de ciudadanos, lo que representa el 84 % de la población de la Unión Europea y Noruega. Este enfoque permitirá a los usuarios seguir utilizando sus aplicaciones de pago preferidas —como Bizum o MB WAY— también en otros países europeos, fomentando una experiencia de pago sin fronteras.
Más allá de la mejora en la comodidad del usuario, esta cooperación se alinea con los objetivos estratégicos de la Comisión Europea y del Eurosistema, que buscan reforzar la autonomía digital y económica del continente. Apostar por soluciones europeas, interoperables y de alto nivel tecnológico no solo refuerza la soberanía, sino que también impulsa la innovación, la competencia y la eficiencia en todo el ecosistema de pagos.
Esta alianza representa un paso decisivo hacia un mercado único de pagos digitales verdaderamente europeo, con beneficios claros tanto para el ciudadano como para el tejido comercial, reduciendo la fragmentación actual y posicionando a Europa como referente global en tecnología de pagos.