DHL lanzó la semana pasada la quinta edición del DHL Global Connectedness Index (GCI): Un análisis detallado de la globalización, que mide los flujos internacionales de comercio, capitales, información y personas. El nuevo informe, presentado públicamente en Amsterdam en rueda de prensa, representa la primera evaluación completa de la evolución de la globalización en 169 países y territorios desde la celebración del Brexit en el Reino Unido y las elecciones presidenciales de 2016 en los Estados Unidos.

A pesar de las crecientes tensiones mundiales, que van en contra de la globalización, la conexión alcanzó un máximo histórico en 2017. El fuerte crecimiento económico impulsó los flujos internacionales, aunque los cambios clave en algunas políticas, como los aumentos de los aranceles estadounidenses impuestos por la administración de Donald Trump, aún no se habían implementado.

El índice (GCI) de 2018 mide el estado actual de la globalización, así como las clasificaciones individuales para cada país, según la profundidad (intensidad de los flujos internacionales) y la amplitud (distribución geográfica de los flujos) de las conexiones internacionales de los países. Según el informe, los cinco países más conectados a nivel mundial en 2017 fueron los Países Bajos, Singapur, Suiza, Bélgica y los Emiratos Árabes Unidos. Ocho de los 10 países más conectados están ubicados en Europa, lo que la convierte en la región más conectada del mundo, en particular para el comercio y los flujos de personas. América del Norte, líder en flujos de capital e información, ocupó el segundo lugar, seguido por Oriente Medio y África del Norte en el tercer lugar.

«Incluso mientras el mundo continúa globalizándose, todavía hay un enorme potencial sin explotar en todo el mundo. El GCI muestra que actualmente, la mayoría de los movimientos e intercambios que estamos viendo son más nacionales que internacionales, pero sabemos que la globalización es un factor decisivo en crecimiento y prosperidad «, explicaba en rueda de prensa John Pearson, CEO de DHL Express. «El aumento de la cooperación internacional continúa contribuyendo a la estabilidad, por lo que las empresas y los países que adoptan la globalización se benefician enormemente».

«Sorprendentemente, incluso después de los avances recientes de la globalización, el mundo sigue estando menos conectado de lo que la mayoría de la gente piensa», comentó al respecto el coautor del estudio Steven A. Altman, Senior Research Scholar at the NYU Stern School of Business and Executive Director of NYU Stern’s Center for the Globalization of Education and Management. «Esto es importante porque, cuando las personas sobrestiman los flujos internacionales, tienden a preocuparse más por ellos. Los hechos de nuestro informe pueden ayudar a calmar esos temores y centrar la atención en soluciones reales a las preocupaciones de la sociedad sobre la globalización».

A nivel global, el GCI muestra, por ejemplo, que casi el 20% de la producción económica en todo el mundo se exporta, aproximadamente el 7% de los minutos de llamadas telefónicas (incluidas las llamadas por Internet) son internacionales, y solo el 3% de las personas viven Fuera de los países donde nacieron. El informe también desmiente la creencia de que la distancia se está volviendo irrelevante. La mayoría de los países están mucho más conectados con sus vecinos que con las naciones distantes.

Las economías emergentes siguen menos conectadas que las economías avanzadas.

El GCI continúa revelando grandes diferencias entre los niveles de globalización en las economías avanzadas y las emergentes. Las economías emergentes comercian casi tan intensamente como las economías avanzadas, pero las economías avanzadas están tres veces más integradas a los flujos internacionales de capital, cinco veces más para los flujos de personas y casi nueve veces con respecto a los flujos de información. Además, mientras que los líderes de los grandes mercados emergentes se han convertido en grandes partidarios de la globalización en el escenario mundial, el progreso de las economías emergentes en términos de conexión global se ha estancado.

Los países del sudeste asiático superaron las expectativas

Los cinco países donde los flujos internacionales superan las expectativas son Camboya, Malasia, Mozambique, Singapur y Vietnam. Cuatro de estos cinco países principales se encuentran en el sudeste asiático. Los países del sudeste asiático se benefician de los vínculos con redes de cadenas de suministro asiáticas más amplias, así como de las iniciativas políticas de la ASEAN que promueven la integración económica. Esta es una noticia positiva para la región, porque una conexión global más profunda puede ayudar a acelerar el crecimiento económico de los países.