El descenso del -0,4% en las ventas del mes de mayo confirman que la crisis del comercio es ya una tendencia estructural, que afecta a todos los formatos, pero muy especialmente al pequeño y mediano comercio. Y es que la caída de las ventas ha sido, un mes más, mucho más acusada en el caso del comercio de proximidad, con un -2% interanual.
“Si vemos la curva de las ventas a largo plazo, desde febrero de 2016, la imagen es desoladora y con una marcada tendencia a la baja”, señala el presidente de la Confederación Española de Comercio, Manuel García-Izquierdo.
Una tendencia que, en opinión de la Confederación Española de Comercio, se va a seguir viendo agravada en los próximos meses si no se adoptan medidas de manera urgente. “Ahora más que nunca es necesario realizar un análisis riguroso y profundo de la situación del sector, y poner en marcha un plan de choque definitivo, con iniciativas efectivas en todos los ámbitos, incluidas medidas fiscales y de urbanismo comercial”, apuntan desde la confederación.
Además, desde la CEC consideran que es apremiante la necesidad de proteger al sector de prácticas abusivas y desequilibrios competitivos, y que no se puede seguir aplazando la vuelta a una política ordenada de rebajas.
Precisamente la libertad para marcar los períodos de descuentos y promociones es uno de los factores que está influyendo en la evolución del sector, al desvirtuarse los principales objetivos de las rebajas: para el comerciante, dar salida al stock, al mismo tiempo que se ofrece al consumidor el mejor precio de la temporada. Como advierten desde la CEC, la falta de unos períodos de rebajas afecta principalmente al comercio de proximidad, ya que “tiene menor capacidad de adaptación para poder dar salida al stock sobrante”.
Estos factores, sumados a la desaceleración en el consumo interno, tal y como advertía la semana pasada el Banco de España, hacen que el comercio se enfrente graves dificultades.
A pesar de los datos negativos del mes de mayo, el comercio de proximidad llega esperanzado a la campaña de rebajas de verano, esperando remontar las ventas hasta en un 2%.
Durante el mes de mayo la tasa de creación de empleo en el comercio minorista fue de un 0,4% interanual, aunque en el caso del pequeño y mediano comercio fue de tan solo un 0,1%. Una tendencia a la baja lenta pero constante desde hace varios meses, que podría afectar a miles de empleos.