Apple da un paso más hacia el futuro del coche autoconducido. La compañía tecnológica ha ampliado el número de SUV Lexus equipados con sus tecnologías de conducción automática que se espera entren en fase de prueba en carreteras públicas de California del 3 al 27 de febrero, según datos de Bloomberg.
El proyecto tecnológico autodirigido del Apple, apodado «Proyecto Titán», fue aprobado para entrar en fase de prueba en carreteras públicas en el estado de California el pasado mes de abril. Curiosamente, los SUV Lexus son el mismo modelo de coche que utilizo Google en los inicios de su proyecto. Según un artículo de Business Insider, los coches de Apple estarán equipados con tecnología LiDAR sensibles a la imagen. Esta tecnología se la han comprado a Velodyne, un diseñador popular que previamente ha suministrado productos a Ford y Waymo. Los vehículos de Apple también están equipados con sensores de radar y una pila de computación en el exterior que están diseñados para ayudar a los sensores LiDAR a visualizar el mundo que rodee el vehículo.
La medida es un gran paso hacia el coche autónomo de Apple, que parece ser ligeramente diferente a las propuestas de sus competidores. Después de explorar inicialmente la construcción de un automóvil eléctrico autónomo, Apple reorientó el esfuerzo a principios de 2017 en torno al diseño de software e inteligencia artificial (IA) que ayude a los coches a conducirse ellos mismos.
Sin embargo, las patentes recientes muestran que la compañía está adoptando un enfoque ligeramente diferente al de la mayoría de los otros proveedores de tecnología automotriz, de acuerdo con informaciones de Business Insider. Por ejemplo, Apple registró una patente el mes pasado que le permite a su sistema confiar en el aprendizaje automático y el software basado en inteligencia artificial que aprovecha los sensores de un automóvil para crear constantemente una nueva imagen virtual de todo lo que existe alrededor del coche, sin necesidad de recurrir a mapas u otros datos externos.
Uber y otras marcas solo han probado sus coches autónomos en áreas previamente mapeadas donde los softwares integrados en los automóviles pueden identificar datos de sensores LiDAR y compararlos con puntos de referencia conocidos.
Sin embargo, Apple sigue estando a la cola en cuanto a llevar su sistema de auto-conducción al mercado, por ejemplo, en términos de asociaciones con fabricantes de vehículos. Apple necesitará al menos un acuerdo con un fabricante de automóviles para poder monetizar este sistema y colocarlo dentro de un vehículo; acuerdo que de momento no ha llegado. En comparación, casi todos los fabricantes de automóviles ya tienen al menos una de estas asociaciones, y probablemente se les desaconsejará trabajar con Apple hasta que pueda demostrar un progreso tecnológico significativo en su sistema.