Desde hace tiempo Amazon se ha dado cuenta de que una de sus vías más rentables de explotación es el programa de socios Amazon Prime, que a través de una cuota anual (en Estados Unidos de 99$) el usuario tiene una serie de privilegios como envíos gratuitos y acceso a contenido multimedia (programas de TV, apps, músca, etc.). Se trata de una forma de crear repetición en el consumo, la vía de la rentabilidad de los e-commerce.
La idea de Amazon es captar nuevos socios (y ofrecer mayor valor añadido a los ya existentes) para el servicio Amazon Prime, que actualmente cuenta con más de 20 millones de usuarios. Para ello, la multinacional con sede en Seattle acaba de lanzar Amazon Prime Credit Card, una tarjeta de fidelización para los miembros Prime que devuelve un 5% del valor de las compras realizadas en el marketplace, eso sí, a través de statement credit (hay que acumular para después comprar). No obstante, la tarjeta no tiene ningún coste añadido para los usuarios Prime.
Se trata, en definitiva, de una idea similar a los SuperPuntos de Rakuten, si bien el marketplace nipón lleva muchos años aplicando esta fórmula. En España, algunos ecommerce han apostado por ideas similares, como el reciente caso de LetsBonus o el que ofrecen Berube y Oportunista.com.