Amazon presentó el pasado mes de agosto su primer avión de carga, que se enmarca dentro de la nueva flota de aviones que va a poner en marcha en los próximos meses. El primer avión mostrado fue un Boeing 767-300 operado por la empresa de carga aérea Atlas AIR, durante la presentación que tuvo lugar en la ciudad natal de Amazon, Seattle. El avión, denominado Amazon One, es uno de los 40 que Amazon tiene previsto alquilará o comprará a través de sus socios Atlas Air o ATSG. Ya hay 11 aviones que vuelan dedicados en su totalidad a operaciones para Amazon.
Una iniciativa que llega para mejorar las velocidad de entrega y capacidad de la cadena de suministro del gigante americano, tras sufrir diversos problemas a la hora de entregar pedidos que llegaban por vía aérea por retrasos de los couriers.
Algo que se suma a varias iniciativas que Amazon lleva tiempo poniendo en marcha para mejorar las entregas, entre las que destacan Amazon Flex, la aplicación móvil de la compañía que permite a los usuarios controlar cómo van sus envíos, y una red dedicada de 4.000 trailers para aumentar su capacidad de transporte por carretera.
Estos esfuerzos se unen a una potente red a nivel mundial con 125 centros de distribución y 20 centros de clasificación donde la compañía utiliza algoritmos de alto nivel, robótica, aprendizaje automático y otras innovaciones con el fin de aumentar la capacidad de transporte hacia sus clientes.
A pesar de esto, Amazon continuará trabajando junto a sus socios habituales en el transporte como son FedEx, UPS y otros más en todo el mundo.
