En un movimiento que refleja su creciente interés por influir en la regulación y la sostenibilidad en Europa, SHEIN ha incorporado al exministro francés del Interior, Christophe Castaner, como miembro de su recién formado Comité Regional de Estrategia y Responsabilidad Corporativa para Europa, África y Medio Oriente (EMEA). Este fichaje se enmarca en una estrategia más amplia para fortalecer su reputación global y responder a crecientes críticas sobre su modelo de negocio.
Christophe Castaner y el comité EMEA: Un enfoque estratégico
Castaner es presidente del Consejo del Gran Puerto Marítimo de Marsella y de Autoroutes et Tunnel du Mont Blanc. Según un comunicado de SHEIN, publicado el 6 de diciembre, Castaner desempeñará un rol clave asesorando al grupo en temas de impacto social y ambiental en Europa. En declaraciones a BFM Business, subrayó que su misión incluye garantizar que SHEIN avance en sostenibilidad y responsabilidad social, una tarea que podría contrastar con sus discursos previos a favor del «made in France».
El Comité EMEA también incluye a Nicole Guedj y Bernard Spitz, destacados expertos en derechos humanos y liderazgo empresarial, respectivamente. Este órgano es parte de la estrategia evoluSHEIN, que busca integrar mejores prácticas globales y locales en los mercados clave del grupo.
Un consejo consultivo externo de ESG para sostenibilidad global
En paralelo, SHEIN ha establecido un Consejo Consultivo Externo de ESG (EEAB), presidido por Ram Gidoomal, exlíder de CottonConnect. Este consejo incluye figuras como Robin Millington, especialista en finanzas sostenibles, y Christoph Wolff, asesor en transición hacia emisiones netas cero. Según Donald Tang, presidente ejecutivo de SHEIN, estos expertos guiarán a la empresa en áreas como gobernanza de la cadena de suministro y descarbonización, respondiendo a las expectativas regulatorias en Europa y otros mercados.
Regulación europea y el cambio de estrategia de SHEIN
El fichaje de Castaner y la creación de estos órganos consultivos llegan en un momento clave. SHEIN enfrenta presión regulatoria en Europa, incluida la Ley de Servicios Digitales de la UE y futuras normativas para reducir el impacto ambiental de la moda ultrarrápida.
En este contexto, SHEIN ha comenzado a posicionarse como un aliado estratégico. Según un estudio de Oxford Economics, difundido en noviembre, las actividades de SHEIN en Francia aportan más de 640 millones de euros a la economía local y generan 2,900 empleos indirectos. Estos datos serán fundamentales en las conversaciones con legisladores europeos y franceses, especialmente mientras SHEIN avanza en su objetivo de cotizar en la Bolsa de Londres con una valoración de 60,000 millones de euros.
Inversiones en sostenibilidad y circularidad
Como parte de su esfuerzo por mejorar su percepción pública, SHEIN ha anunciado un fondo de 250 millones de euros para descarbonizar la industria textil y una dotación de 10 millones para apoyar a jóvenes talentos europeos. Además, el grupo asegura que su modelo de producción a pequeña escala contribuye a minimizar desperdicios al fabricar únicamente lo que demanda el mercado.
El nombramiento de Christophe Castaner y otros pasos estratégicos de SHEIN reflejan su intención de consolidar su presencia en Europa, adaptándose a un entorno regulatorio más exigente. Sin embargo, la empresa aún enfrenta escepticismo por la opacidad en sus prácticas y cifras de ventas. Mientras SHEIN busca influir en la narrativa sobre su modelo de negocio y sostenibilidad, dependerá de la efectividad de estos nuevos asesores y de su capacidad para cumplir con las expectativas regulatorias y sociales del mercado europeo.
