Han pasado 3 años desde que la empresa Oculus VR presentase al mundo su proyecto de Realidad Virtual llamado Oculus Rift, un gadget que pretende cambiar todo lo conocido en el mundo digital y que tras una serie de contratiempos, con la adquisición de la compañía por parte de Facebook de por medio, parece que saldrá al mercado en el 2015 según declaraciones de Mike Schroepfer, director de tecnología de la empresa en la conferencia F8 Facebook.
La idea inicial del uso de las gafas 3D siempre ha sido el ocio electrónico -donde gurús del sector de los videojuegos como John Carmack forman parte del proyecto-, pero, ¿y en el ecommerce? Para los consumidores sí que se aceptaría una revolución de este calibre, según un estudio de la compañía Walker Sands titulado ‘Future of Retail’ en el que un 63% de los encuestados estaría dispuesto a cambiar sus hábitos de compra y utilizar este sistema.
Estos datos reflejan un cambio en la opinión del consumidor. Recién haber comprado la compañía de Mark Zuckerberg a Oculus VR por 2 mil millones de dólares, las críticas de los usuarios no se hicieron esperar al considerar una intrusión en la intimidad del usuario que la red social forme parte del proyecto y del temor a un bombardeo constante de publicidad, como así se mostró en el anterior informe de Walkers Sands de hace un año donde tan sólo un 37% de los encuestados utilizaría Oculus Rift para comprar. El motivo que ha impulsado esta nueva tendencia, sostiene un 35% de los encuestados, es la facilidad que ofrece el dispositivo para comprar.
Pero, ¿qué funciones reales para el ecommerce se esperan realizar a través del VR? De momento son meras conjeturas, no obstante Tesco firmó un acuerdo con Oculus VR en 2014 para una crear un plataforma de compra VR.
Las posibilidades que puede ofrecer son infinitas. Vídeo por Demanda, anuncios personalizados a través de la plataforma Facebook… Todo está a disposición de la imaginación de los comerciantes. Y el consumidor ya ha dado luz verde a que las ideas fluyan.
