Nike ha decidido retomar las ventas directas en Amazon. Con esta decisión la compañía marca el fin de una etapa de seis años en la que la marca del swoosh había optado por reforzar su estrategia DTC (direct to consumer) y controlar de forma más estricta su distribución. El regreso a la plataforma se produce en un contexto de presiones sobre sus márgenes, en el que la compañía también ha anunciado un aumento de precios para ropa y calzado a partir de esta misma semana.
Según ha informado CNBC, Nike ha comenzado a vender de forma oficial en Amazon.com a través de su propia tienda autorizada. Esto supone un giro significativo respecto a su estrategia anterior, cuando en 2019 abandonó el marketplace para centrarse en sus canales propios y en distribuidores seleccionados. La compañía había justificado entonces su salida como parte de su apuesta por ofrecer “una experiencia más premium y personalizada”.
Sin embargo, el entorno actual ha empujado a Nike a reconsiderar su enfoque. El regreso a Amazon le permite ampliar su alcance y mejorar su posicionamiento frente a otras marcas que están ganando terreno en el ecommerce multicanal. Además, vuelve a un canal que cuenta con millones de usuarios y una logística potente, lo que puede ayudar a incrementar sus ventas en un momento en el que sus beneficios se han visto tensionados.
Desde la compañía han confirmado que esta decisión forma parte de una estrategia más amplia para fortalecer su ecosistema comercial. “Esto incluye la expansión a nuevas cuentas digitales, incluido Amazon en los EE. UU., nuevos socios físicos como Printemps, mejorar las experiencias minoristas en todo el mercado y lanzar la búsqueda conversacional impulsada por inteligencia artificial de Nike para mejorar nuestros servicios en línea”, explicó un portavoz en un comunicado.
Los precios se elevan para proteger los márgenes
En paralelo, Nike también ha confirmado una subida de precios en algunos de sus productos a la CNBC, en especial en las categorías de calzado y textil. Esta decisión, forma parte de su plan para proteger los márgenes ante el aumento de los costes de producción y la presión promocional generalizada en el sector. La compañía ya había advertido de esta medida en sus últimos resultados trimestrales, como parte de su respuesta a un entorno económico complejo y una demanda que se está ralentizando en algunas regiones.
Según se ha podido conocer, el gigante del equipamiento deportivo aplicará una subida de precios de entre dos y diez dólares en sus productos. Por ejemplo, los artículos con un precio de entre 100 y 150 dólares experimentarán un incremento de cinco dólares. En el caso del calzado, el aumento podrá alcanzar también los diez dólares: aquellos modelos con un precio superior a los 150 dólares verán su etiqueta encarecida en diez dólares, mientras que los productos con un precio inferior a los 100 dólares no sufrirán ningún cambio.
El doble movimiento —vuelta a Amazon y ajuste de precios— muestra cómo Nike está reequilibrando su estrategia comercial para adaptarse a un mercado cambiante. La firma busca mantener su rentabilidad sin renunciar al crecimiento, combinando la expansión de sus puntos de contacto con el consumidor con un control firme de su rentabilidad por producto.
Con este paso, Nike se alinea con una tendencia creciente en el sector de la moda y el deporte: volver a marketplaces estratégicos para maximizar visibilidad y ventas, sin abandonar la búsqueda de eficiencia y control sobre la marca.