Cada día la industria de la belleza sorprende con innovaciones y nuevos productos: colágeno, caviar, aceites milagrosos… la mayoría de ellos enfocados al público femenino. La forma en la que las consumidoras de productos cosméticos responden a todo este abanico de posibilidades ha sido analizada por el estudio Survey Lab Beauté de vente-privee a nivel europeo entre mujeres de 18 a 54 años.

Según el Survey Lab Beauté de vente-privee el mercado se divide principalmente entre embajadoras de marca (29%) y exploradoras de marca (32%). Las primeras se distinguen por su fidelidad tanto a las marcas como al tipo de producto que consumen habitualmente y las segundas, por cambiar regularmente de productos y de marcas de tratamiento y maquillaje. Finalmente, se encontraría un perfil mixto (39%) que declaran fieles a las marcas pero les gusta cambiar regularmente de tipo producto.

Respecto a las ‘exploradoras de marca’, en Europa destaca la impulsividad de las españolas, especialmente comprando online. Dentro de ese afán por probar y descubrir, Internet se posiciona como un canal al alza donde el 70% reconoce haber comprado ya algún producto gracias a los buenos precios y a la posibilidad de comparar ofertas.

Según este estudio, y a diferencia de lo que pueda parecer, dentro del grupo de mujeres que les gusta innovar y probar nuevos productos, tres de cada cuatro son mujeres maduras. Sin embargo, de las que son fieles a sus marcas y productos un tercio son menores de 30 años.

Como curiosidad, este estudio de vente-privee ha analizado cuántos productos tienen las mujeres en su tocador. Las ‘exploradoras de marca’ tienen de media 72 productos de belleza, 25 más que las ‘embajadoras’. Sin embargo, a la hora de hacer uso de ellos, ambas emplean únicamente el 40% de los mismos. Y es que, casi el 70% de las mujeres que les gusta descubrir nuevos productos, compran cosméticos al menos una vez al mes frente al 54% del grupo más conservador.  

Por regla general, las españolas son más receptivas a probar nuevos productos en lo que a maquillaje se refiere. Son más reticentes con los productos de tratamiento facial y antiedad. Las lacas de uñas, las sombras de ojos y las barras de labios, son los productos con los que son más “infieles”; la base de maquillaje y la crema facial, son los menos susceptibles a ser cambiados.

Minitallas y muestras de producto son las claves para cambiar

Ni influencers ni celebrities, lo que de verdad influye en la decisión de las españolas a la hora de cambiar de marca o producto de belleza son las muestras o las minitallas. Esto es así en ambos perfiles, embajadoras y exploradoras de marca, por encima de factores como el precio o la publicidad.

En el caso de las mujeres que se declaran fieles a sus marcas y productos, más del 70% cambió gracias a una muestra que probó y le gustó. Sólo el 39% lo hizo porque su marca habitual subió considerablemente de precio.

En el caso de las que disfrutan más de probar nuevos productos, pasó algo muy similar y el 77% de ellas cambió tras testar una muestra. Este colectivo es más sensible a los precios y a las opiniones y el 51% lo hizo por beneficiarse de una promoción, el 46% por la recomendación de un conocido y el 40% por una innovación del mercado.

Estas son las principales motivaciones para el consumo de belleza, muy por encima del impacto de influencers, celebrities o de la publicidad, que no suponen ni el 10% de los casos que escogen éste como el motivo de su cambio.