Google sigue pisando fuerte para competir con Amazon. El año pasado Google apostó fuerte por Google Shopping con grandes campañas de marketing que buscaban conseguir relevancia en un mundo dominado por Amazon. En el Q1 de 2016, por ejemplo, el número de clics y de pedidos en Google Shopping aumentaron un 171%, con un aumento del 23% en el gasto publicitario. Además, las las visitar desde los móviles aumentaron un 130% en ese mismo período.
Un estudio de la firma de investigación de marketing, Sidecar, descubrió que, por primera vez, el gasto de los retailers en los anuncios publicitarios de Google Shopping superó el gasto en anuncios de texto. La misma investigación afirmó que los dispositivos móviles impulsaron el 29% de los ingresos totales de Google Shopping en 2016, en comparación con el 17% de 2015.
Sin embargo, Google está perdiendo la batalla contra Amazon. Una encuesta realizara por Bloomreach el año pasado mostró que el 55% de los compradores utilizan Amazon como primer recurso de búsqueda a la hora de comprar online. La misma encuesta afirmó que, en consecuencia, la participación de Google como primera opción de búsqueda estaba en declive. Un estudio más reciente de UPS encontró algo similar, aunque en un porcentaje más bajo, con el 29% de los 5.000 compradores encuestados afirmando que se dirigen primero a Amazon.
Para hacerle frente, Google ha lanzado una actualización para Google Shopping que tiene como eje central la personalización. Cuando los consumidores están listos para comprar, acuden a plataformas como Amazon porque gracias al big data su experiencia de compra es más sencilla, y las recomendaciones de compra más precisas. Basándose en este modelo, Google quiere personalizar las búsquedas de sus usuarios para situarse por delante de Amazon.
El mes pasado Google recibió un golpe fuerte en su carrera contra Amazon: una multa de 2.420 millones de euros por prácticas monopolísticas con su comparador Google Shopping. El órgano de la Unión Europea determinó que Google había dado sistemáticamente un lugar predominante de su propio servicio, Google Shopping, mediante un algoritmo de búsquedas.