Reino Unido decretó el lockdown (confinamiento) desde la medianoche del 23 de marzo, situación que se prolongó hasta el 15 de junio. Durante esas 12 semanas toda actividad no esencial (al igual que ocurrió en nuestro país) se vio afectada. Los consumidores británicos que quisieran comprar algo más que comestibles o medicamentos, tenían que hacerlo de forma online.
Y al igual que en España, tras la apertura, el comercio físico se ha visto aún perjudicado por las medidas de distanciamiento social y la propia precaución de los consumidores.
Según un reporte de eMarketer, las compras online en UK crecerán este año un 34,7% con respecto a 2019; es decir, alcanzarán una facturación total de 180.390 millones de dólares.
Este aumento significativo supondrá que la cuota del comercio electrónico pasará a superar la barrera del 30% del total de las ventas al por menor en el Reino Unido por primera vez. En 2019, esa cuota se situó en sólo el 21,8%.
2021: año en negativo para el ecommerce
Tal como señala el estudio de eMarketer, el boom del online no se prolongará en 2021, cuando se prevé disminuyan un 6,3% con respecto a 2020, mientras que la cuota de ventas sobre el total del retail también caerá hasta los 28,3% sobre el total.
De hecho, el ritmo de crecimiento para el comercio electrónico en los próximos años se verá muy ralentizado por el auge del canal tradicional, como así indicarían los años 2022 (crecimiento del 4,2%), 2023 (crecimiento del 4,0%) y 2024 (crecimiento del 3,8%).
No obstante, la foto final del lustro que va desde 2019 a 2024, mostrará un crecimiento del ecommerce en UK desde los 135.000 millones de 2019 a alcanzar los 190.000 millones de dólares para el horizonte 2024.
¿Cómo se comportará el cliente en el futuro?
En mayo de este año, durante el punto álgido del confinamiento, el 42% de los compradores digitales del Reino Unido dijeron que comprarían más digitalmente en el futuro. Para agosto, cuando todas las tiendas pudieron reabrir, esa proporción había subido al 55%.
En cifras globales, Reino Unido alcanzará una demanda de 45,4 millones de compradores digitales en 2020, cifra que representan el 81,1% de la población.
