Amazon ha anunciado un aumento de los costes de su servicio de cumplimiento multicanal. Las nuevas tarifas entrarán en vigor para los vendedores europeos a partir del próximo 7 de abril. Según la compañía, “el aumento se debe a la subida de los costes operativos debido a la inflación”. Concretamente, en un anuncio publicado en su plataforma de vendedores, Amazon ha detallado que “el tamaño del paquete y la categoría de gran tamaño se ven afectados por el cambio de precio, mientras que el tamaño del sobre permanecerá prácticamente sin cambios”. “Los niveles de sobres y paquetes continuarán beneficiándose de nuestros descuentos de unidades múltiples recientemente introducidos, que ofrecen tarifas por unidad más baratas para pedidos de unidades múltiples”, ha asegurado la compañía.

Precios de logística de Amazon

En paralelo, los precios de la Logística de Amazon (FBA), un servicio en el que Amazon se encarga de almacenar, empaquetar y enviar los productos, así como de gestionar el servicio de atención al cliente y las devoluciones, también se han ajustado. Según informó Internet Word, las tarifas de vendedor han aumentado un promedio de 6,2%. Generalmente, los precios de FBA se ajustan una o dos veces al año.

Y es que, Amazon cada vez se embolsa más ingresos de aquellas empresas que se apoyan en el marketplace para vender sus productos y llegar a más consumidores. Actualmente, según un estudio elaborado por Marketplace Pulse, la empresa se está llevando más del 50% de los ingresos de los vendedores, frente al 40% que se llevaba hace cinco años. Generalmente, un vendedor tipo de Amazon asume una tarifa de transacción del 15% (‘tarifa de referencia’), a la que se suma una tarifa de cumplimiento que oscila entre el 20 y el 35% y hasta un 15% más por publicidad y promociones. No obstante, las tarifas totales varían según la categoría, el precio del producto, el tamaño, el peso y el modelo de negocio del vendedor.

No obstante, fuentes genéricas de Amazon explicaron a Ecommerce News que “los números presentados en este estudio no son una descripción precisa del coste de vender en Amazon». «Lo que sí es verdad es que la compañía está invirtiendo más que nunca para respaldar el crecimiento de sus colaboradores comerciales para ayudarlos a incrementar sus ventas. Ofrecemos una amplia gama de servicios para expandir sus negocios y los colaboradores comerciales pueden gestionar muchos aspectos logísticos por sí mismos. Los vendedores que eligen contratar servicios opcionales de logística o publicidad de Amazon es porque ven en ello un valor añadido para su negocio», apostillaron.

Deja ‘en fuera de juego’ a los distribuidores europeos

Con el objetivo de seguir recortando gastos, ahora Amazon también ha decidido eliminar a los distribuidores europeos de la ecuación de su negocio, de manera que aquellos que venden directamente a los almacenes de Amazon ya no podrán hacerlo, salvo que cuenten con los derechos en exclusiva para la distribución de una marca.

Según un documento al que tuvo acceso la CNBC a finales del pasado mes de febrero, Amazon cortará su relación con los distribuidores europeos a partir del próximo mes de abril, cuando concluye el plazo concedido por la compañía para que los distribuidores se adapten a este nuevo modelo. Se trata de una decisión de gran calado para los distribuidores, que ya no podrán vender productos directamente a Amazon. Las únicas alternativas serán convertirse en comerciantes externos, es decir, actuando como sellers vendiendo en la plataforma pero soportando todos los costes asociados incluidos los logísticos, o bien seguir como distribuidores de una marca en caso de que tengan los derechos en exclusiva.

Recorte de empleos

A principios de enero, la compañía también anunció el despido de unos 18.000 empleados. Amazon empezó despidiendo en noviembre a 10.000 trabajadores, pero finalmente el ajuste ha sido mayor de lo esperado. Los despidos han afectado en su mayoría a las divisiones de las tiendas (Amazon Stores) y el de PXT, que es el área de recursos humanos de la empresa. Los recortes ascienden al 6% de la plantilla, de aproximadamente 300.000 personas, y representan un cambio rápido para una entidad que hace poco duplicó su límite salarial base.

Amazon además cerró el 2022 con números rojos. La compañía estadounidense ha estado sorteando las pérdidas y cerrando con beneficios desde aproximadamente el 2015 gracias a su negocio en la nube. Sin embargo, el pasado ejercicio registró unas pérdidas de 2.722 millones de dólares.