Una campaña de inspección sobre el comercio electrónico, realizada por la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid, ha puesto de manifiesto que más del 25% de las infracciones detectadas se debieron a la deficiente información al cliente, por no mostrar el precio final de compra, no determinar la fecha de entrega, no aportar los datos completos sobre los responsables de la página web y por el cobro de servicios no solicitados.
Se trata de uno de los resultados de la campaña ‘Internet 2013’, que se realizó durante todo el año pasado como continuación de la desarrollada en 2012, y en la que se inspeccionaron 44 empresas dedicadas a la venta de productos y prestación de servicios mediante internet. Consumo ha sancionado un total de 31 infracciones, determinando que la existencia de cláusulas abusivas es la irregularidad más extendida (el 25,8%de las infracciones cometidas).
De esta forma, se ha detectado la imposición al consumidor de obstáculos onerosos para realizar devoluciones, limitaciones o penalizaciones al derecho de desistimiento, exoneración de responsabilidad, o la vinculación de ofertas a condiciones sujetas a la voluntad del empresario. En este sentido, la Comunidad de Madrid analizó diferentes aspectos de los procesos de venta, constatando que más del 10% de las infracciones se produjeron por no mostrar la verdadera naturaleza del servicio ofertado.
Esta campaña tiene como objetivo verificar y comprobar que el empresario otorga al consumidor un nivel de información suficiente sobre las características esenciales del contrato electrónico, para que sea efectiva la protección de sus derechos y legítimos intereses económicos, de acuerdo con la normativa vigente. Por otro lado, la selección de las páginas web se hizo teniendo en cuenta las reclamaciones presentadas ante Consumo en 2013.
Como consecuencia de las actuaciones inspectoras, aún se encuentran en trámite 15 expedientes y se notificaron 11 apercibimientos. A lo largo del procedimiento, algunas de las irregularidades ya se subsanaron. Al margen de esta campaña específica, en la inmensa mayoría de las inspecciones que lleva a cabo Consumo se planifica que los servicios inspectores también controlen las páginas web de las empresas que se visitan, reforzando así el control sobre las informaciones contenidas en Internet.
Por último, en 2014 se prevé la continuidad de estas actuaciones inspectoras en el comercio electrónico que desarrolla la Dirección General de Consumo, debido al creciente interés e importancia que tiene para los consumidores esta modalidad de consumo de bienes y servicios.