Abercrombie&Fitch se centra en sus tiendas para impulsar la omnicanalidad. El grupo estadounidense, que ya factura online más de 1.000 millones de dólares, ha definido una nueva estrategia de retail para sacar mayor partido a la omnicanalidad.
La empresa busca dejar atrás la estrategia de abrir flagship stores y apuesta ahora por puntos de venta de dimensiones más reducidas y con mayor capacidad para vincular al ecommerce; teniendo en cuenta cuestiones como comprar online, recoger en tienda o pedir desde tienda.
Esta estrategia ha derivado en el cierre de varias tiendas, que se suman a los más de 500 que la empresa ya ha ejecutado a lo largo de esta década.
El vicepresidente y responsable financiero del grupo, Scott Lipesky, explicó en la junta de accionistas celebrada esta semana que las tiendas son realmente una parte del legado de la marca, pero que en la actualidad están obsoletas y no se corresponden con la imagen que hoy se quiere dar de la firma, de acuerdo a información publicada por Modaes.es
